¿Qué desventajas tienen los brackets?

Todos estos problemas se pueden prevenir, controlar y tratar a lo largo del tratamiento de ortodoncia con brackets:

La colocación de ortodoncia está contraindicada en pacientes que tienen una caries sin tratar o una enfermedad periodontal sin controlar. Antes de poner el aparato será necesario abordar estas patologías.

¿Qué no comer con brackets?

Debido al movimiento de los dientes ejercido por los brackets: genera dolor en los dientes e hipersensibilidad dental. Debido a las rozaduras de los brackets en la cavidad bucal: causa la aparición de aftas (úlceras bucales), irritaciones o heridas en la parte interna de la boca.

Durante un breve periodo de tiempo tras su colocación inicial, también puedes sentir algo de dolor en las mejillas. Los aparatos modernos están diseñados para aliviar el dolor en la medida de lo posible, pero aún así rozan las mejillas, causando dolor o incluso pequeños cortes.

Normalmente, los brackets o frenillos, se instalan alrededor de los 11 o 12 años, pero esto no es una norma, ya que en algunos casos se recomiendan a niños más pequeños, o a personas adultas. El especialista agrega que “se va a tomar la decisión dependiendo del tipo de problema que tenga la persona.

En el caso de realizar un tratamiento de ortodoncia debido a una malposición dental sencilla, puede tener una duración de entre 3 a 4 meses. Un tratamiento más complejo puede llegar a durar 2 años.

¿Antes de ponerte los brackets que te hacen? De forma previa al inicio del tratamiento de ortodoncia, se toman fotografías, radiografías y se modelos digitales o analógicos para poder comprobar la evolución del tratamiento.

Aún con los avances en ortodoncia, las incomodidades causadas por los brackets convencionales suelen durar de cinco días a una semana.

Los brackets duelen habitualmente entre 5 a 7 días. La primera vez que se colocan sobre los dientes suele ser la que causa mayores molestias. Cuando asistas a tus próximos controles de ortodoncia también puedes sentir molestias los días posteriores, esta vez de menor intensidad.

Brackets metálicos - Aproximadamente entre 2,000€ y 3,000€ Brackets invisibles - Aproximadamente entre 3,000€ y 5,000€ Brackets autoligables - Aproximadamente entre 3,000€ y 5,000€ Brackets linguales - Aproximadamente entre 3,000€ y 7,000€

Los refrescos, tanto normales como light, las bebidas energéticas y deportivas y otras bebidas de frutas debilitan el esmalte dentario, especialmente si se está siguiendo un tratamiento de ortodoncia como brackets o alineadores.

Si decides utilizar la lengua intenta que los labios estén bien abiertos, para no «chocar» contra los brackets. Al principio hay que probarlo de forma muy suave. Después verás que la sensación es mejor. Si ambos lleváis brackets no os preocupéis por si se atascan, de momento no son magnéticos.

Es muy frecuente que nuestros pacientes nos pregunten atemorizados si después de llevar ortodoncia les quedarán manchas blancas en los dientes. ¿Verdadero o falso? Es una creencia muy extendida, pero es una absoluta equivocación. Decir que los aparatos de ortodoncia causan manchas blancas es totalmente falso.

De esta manera, los dientes irán moviéndose progresivamente hasta alcanzar la posición adecuada. Por este motivo, es normal que, una vez terminada la revisión, vuelvan a aparecer el dolor o las molestias pasajeras, durante los días posteriores, pero es algo común al tratamiento y suelen durar 1 o 2 días.

El bracket de autoligado es la evolución del bracket de ligadura y, por tanto, es lógico pensar que ofrezca, por así decirlo, más prestaciones. Nuestra directora de clínica, Adirane Guerra, lo sintetiza en una frase: «El bracket de autoligado es más limpio, más rápido, duele menos y nos da más anchura para trabajar.

Al tener una mala higiene dental, las encías pueden empezar a mostrar signos de sangrado e inflamación. Llevar brackets por mucho tiempo puede causar manchado en los dientes.

Al punto de que hay personas que dicen “quiero usar brackets pero no los necesito”. Hay que tener claro que ningún dentista recomendará su uso si no es necesario porque comenzarán a generar problemas que antes no existían.

La posición de los brackets es una de las partes más importantes en el tratamiento de ortodoncia. Si un bracket se coloca ligeramente fuera de su sitio idea, el diente no quedara recto y alineado.

El promedio se sitúa en los dieciocho meses, pudiendo darse por finalizado a los doce o extenderse a los veinticuatro. En los esporádicos casos de maloclusiones muy severas, se puede extender hasta los treinta y seis meses.

Tu propia biología afectará al tratamiento, ya que puede que tus dientes tarden más o menos en alinearse que el de otros. Todos somos diferentes, y los dientes de cada paciente reaccionan al tratamiento de una manera. Para la mayoría de los pacientes, el tratamiento ortodóntico tarda entre seis meses y dos años.

Por regla general, cuando los niños son pequeños el tratamiento de cierre de mordida suele durar entre 6-12 meses. Sin embargo, cuando las personas afectadas ya son jóvenes o adultos, el tratamiento puede llegar a alargarse hasta 24 meses.

Evita los bocadillos de corteza dura; los ortodoncistas recomiendan que, en este caso, consumas pan de molde o tipo Viena. Es importante también que no estires ningún alimento con los dientes. Es más recomendable romperlo a trocitos antes de llevártelo a la boca en lugar de forzar tus dientes.

Los brakets no son ningún impedimento para eliminar el sarro de tus encias en la clínica dental. "¿Pero me puedo hacer una limpieza con los brakets puestos doctor?" Esta pregunta es muy habitual en la consulta de Ortodoncia en la clinica CASHER DENTAL. Y la respuesta que les dan los doctores es SI.

Es importante antes de la colocación de los brackets, realizar una profilaxis dental y una vez ya comencemos el tratamiento, va a depender de cada paciente, pero normalmente aconsejamos hacer una higiene cada 6 meses.

¿Qué duelen más, los brackets de arriba o de abajo? Dado que la densidad del hueso maxilar inferior es menor, podemos decir que duelen los brackets de abajo más que los de arriba.

Esto quiere decir que, si un diente choca directamente con el bracket a la hora de morder y masticar, a largo plazo este se irá viendo afectado y puede acabar por despegarse. Para evitar esto, los dentistas suelen hacer un estudio de la mordida y advertir a los pacientes de que tienen este problema.