¿Qué distingue a los reptiles?

Los reptiles son animales vertebrados que se caracterizan por desplazarse reptando. Es decir, arrastrándose por el suelo, como la serpiente, el cocodrilo, el lagarto o la tortuga. Ello es debido a que originalmente vivían en medios acuáticos. La evolución los ha llevado a adaptarse totalmente a la vida terrestre.

Por el contrario, los reptiles se caracterizan por contar con una piel formada a partir de escamas de queratina, que es una sustancia presente en muchos animales y que forma tejidos sólidos y resistentes, como por ejemplo parte de las uñas y el cabello de los mamíferos, incluidos los seres humanos.

Otras características de los reptiles

Los reptiles respiran por pulmones durante todo su ciclo de vida, mientras que los anfibios respiran por branquias cuando son crías y por pulmones, además de por la piel cuando son adultos.

No se puede definir por sinapomorfias, como es la forma correcta. En cambio, se define por una combinación de las características que tiene y las características que le faltan: los reptiles son los amniotas de escamas que carecen de pelo o plumas.

Reptiles se clasifican en lagartos (saurios), cocodrilos, serpientes (ofidios) y tortugas (quelonios). Esta clase de animales son los ancestros tanto de los mamíferos como de las aves.

En primer lugar, los reptiles tienen pulmones y branquias. Los pulmones les sirven para respirar aire, mientras que las branquias les permiten absorber el oxígeno del agua. Esto hace que los reptiles sean criaturas increíblemente adaptables: pueden vivir tanto en entornos terrestres como acuáticos.

Son capaces de controlar su temperatura corporal, así como de adaptarse a cualquier entorno, sentir dolor, sentir miedo, tener personalidad, inteligencia y resistir al cautiverio. Los reptiles también poseen la capacidad para reconocer individualmente a otros de su misma especie a través de sus olores corporales.

La mayoría son carnívoros, pues se alimentan de larvas, animales herbívoros u otros insectos. Respiran a través de pulmones, si bien habitan tanto en medios terrestres como acuáticos. Se reproducen de manera sexual, a través de huevos que no son incubados, ya que estos tienen cáscara para evitar que se sequen.

El tacto está bien desarrollado. La piel, al ser pobre en glándulas, está muy bien dotada de mecanorreceptores que detectan la tensión o presión ejercidas sobre ella.

Las tortugas, junto con las lagartijas, serpientes y cocodrilos, conforman la clase de los reptiles. Son vertebrados fáciles de reconocer por su concha, que sirve de protección para los órganos internos y consiste de una parte dorsal llamada caparazón y una parte ventral denominada plastrón.

Las ranas y los sapos son muy parecidos, pues los dos son anfibios. Una de las diferencias es que las ranas viven en el agua o muy cerca y los sapos fuera o más lejos de las fuentes de agua.

Las serpientes son un tipo de reptiles que se caracterizan principalmente por la carencia de patas. Su anatomía, caracterizada por un cuerpo alargado, está preparada para permitir un desplazamiento sin necesidad de extremidades: pueden moverse cómodamente tanto por tierra como por agua.

La sangre de los reptiles es fría, pero su cuerpo necesita calentarse para vivir. Su metabolismo se acelera o disminuye conforme a la temperatura de su entorno y, por eso, se mueven lentamente cuando hace frío y más rápido cuando hace calor.

Todos los reptiles tienen el cuerpo cubierto de escamas. La mayoría tiene cuatro patas cortasy una cola. Las serpientes son reptiles sin patas, por eso reptan, es decir, se desplazan arrastrándose por el suelo. Hay otros reptiles que protegen su cuerpo con un caparazón, como las tortugas.

A algunos reptiles les gusta cavar, mientras que otros pasan la mayor parte de su vida en el agua. Algunos reptiles también necesitan hibernar. Muchos reptiles mudan su piel durante su crecimiento, y por lo general no pueden ser manipulados o molestados durante este proceso.

¿Cuáles son los tipos de reptiles domésticos?

Generalmente, los reptiles tienen el cuerpo cubierto de una piel seca formada por escamas, respiran por pulmones y tienen la sangre fría. Es decir que su temperatura corporal varía en función de las condiciones climáticas. La mayoría son ovíparos: se reproducen mediante huevos que fecundan en el nido.

Las escamas ayudan a los reptiles con movimiento, defensa, retención de agua y camuflaje. Las escamas de algunos reptiles los ayudan a moverse. En el caso de las serpientes, las escamas de sus vientres agarran pequeñas imperfecciones en las superficies y crean fricción para impulsar las serpientes hacia adelante.

Los reptiles requieren menos mantenimiento y atención que la mayoría de los animales de compañía, pero tienen necesidades específicas de luz, calor y humedad. Debes vigilarlos de cerca para evitar enfermedades. Sus hábitats deben mantenerse limpios.

La visión de los reptiles es uno de sus sentidos más desarrollados. Es una de sus principales formas de detectar a sus presas y también el peligro inminente.

Algunos reptiles, como la serpiente, tienen un olfato muy desarrollado. Además de las fosas nasales, muchos reptiles disponen de unos órganos sensoriales en el paladar. También disponen de numerosas papilas gustativas y táctiles en la lengua. Los ojos de los reptiles pueden presentar párpados móviles.

En al menos un tipo de reto intelectual, ciertos reptiles han demostrado recientemente ser tan inteligentes como las aves y los mamíferos.

El sistema digestivo incluye el tracto digestivo y las glándulas anexas. El tracto se divide en cavidad bucal, faringe y canal alimentario, formado por esófago, estómago intestino delgado, intestino grueso y ano, que puede abrirse en una cloaca.

Los reptiles pueden ser carnívoros, insectívoros o herbívoros, la mayoría son insectívoros, aunque existen algunas especies que se pueden alimentar sólo con plantas, como las iguanas y carne como las serpientes.