¿Qué domicilio fiscal debo poner en la declaración de la renta?

Para la Agencia Tributaria, y por tanto de cara a la declaración de la renta, ”lo relevante es que el domicilio fiscal donde reside habitualmente esa persona sea el correcto”, aseguran a Newtral.es. Todo lo que tiene que ver con el empadronamiento depende de los ayuntamientos.

Se trata, por tanto, del lugar de residencia habitual. Al empezar a rellenar los diferentes apartados de la declaración, deberemos ratificar nuestro domicilio fiscal. Ocurre que en el año natural (en esta campaña será 2022) hemos podido cambiarlo y residir en otra vivienda, en el caso de persona física.

El domicilio o dirección fiscal es básicamente el lugar donde se está establecido como persona física o jurídica y desde el cual se tiene que hacer frente a las obligaciones fiscales con Hacienda.

Por lo general, la administración tiene tres opciones de saber cuál es tu lugar de residencia: mediante el registro de empadronamiento, a través del domicilio fiscal registrado en Hacienda o consultando el consumo en tus suministros.

El domicilio fiscal hay que tenerlo actualizado siempre, pues Hacienda puede poner una multa de 100 euros si no se ha cambiado el domicilio. Además, todas las notificaciones que lleguen, el contribuyente no las podrá ver, pero la Agencia Tributaria desconoce este aspecto y todos los trámites seguirían su curso.

En primer lugar, el domicilio fiscal es el lugar donde se está establecido como persona física o jurídica y desde el cual se tiene que hacer frente a las obligaciones fiscales con Hacienda. En segundo lugar, el empadronamiento es el acto por el cual una persona se registra en el Padrón Municipal del lugar que reside.

Lugar donde una persona normalmente pasa los periodos diarios de descanso, sin tener en cuenta las ausencias temporales por viajes de ocio, vacaciones, visitas a familiares y amigos, negocios, tratamiento médico o peregrinación religiosa.

Es tan, tan fácil como meterte en la web de la Agencia Tributaria y seguir estos pasos:

Para cambiar de domicilio fiscal puedes acceder a la página web de la Agencia Tributaria y hacer el trámite de manera telemática mediante DNI electrónico, el sistema Cl@ve o certificado electrónico.

¿Cómo se obtiene el certificado de residencia fiscal? Obtener el certificado de residencia fiscal es un trámite sencillo. Se puede realizar de forma telemática o en formato papel. Tan solo hay que acceder a la página web de la Agencia Tributaria, y autenticarse mediante DNI-electrónico, certificado digital o Clave PIN.

Si es tu caso, y resides en un lugar donde no estés empadronado, puedes presentar a Hacienda el certificado de centro de trabajo, el libro de familia donde figura que los hijos nacieron en la vivienda que se desea acreditar, recibos de luz, gas o internet, y recibos de la comunidad de vecinos y de propietarios.

Según la legislación española, un matrimonio puede tener dos viviendas habituales en ciertas circunstancias. Esto se refiere a casos donde ambos cónyuges tienen motivos legítimos para residir en diferentes lugares debido a actividades económicas, laborales o familiares.

¿Cuántas veces puede investigar Hacienda? Cuando el contribuyente recibe una notificación de Hacienda sobre una inspección fiscal porque tiene sospechas, debe saber que esa será la única vez.

Consecuencias por no actualizar el domicilio

La especialista dijo a Reforma que lo anterior se debe a que si el Servicio de Administración Tributaria (SAT) detecta que el domicilio fiscal de un contribuyente no está actualizado, podría cancelarle sellos digitales, lo que le impediría emitir facturas.

Hay tres formas de cambiar el domicilio fiscal en la Agencia Tributaria:

Una persona física que no forma parte del Censo de Empresarios, Profesionales y Retenedores y quiere comunicar el cambio de domicilio fiscal ¿De qué plazo dispone para presentar el modelo 030? El plazo será de tres meses desde que se produzca el citado cambio.

Lo mismo ocurre con otros servicios públicos como los colegios públicos o las bibliotecas. Al estar empadronado en un sitio y vivir en otro será necesario trasladarse al lugar en el que se está empadronado para disfrutar de ellos.

Según la Ley General Tributaria (LGT) el domicilio fiscal es el lugar donde se localiza al obligado tributario, ya sea persona física o jurídica, en sus relaciones con la Administración. Así: El domicilio fiscal para las personas naturales o físicas es el de su residencia habitual.

Si vendes tu vivienda habitual antes de que hayan transcurrido tres años desde su adquisición, perderás el derecho a la deducción por vivienda habitual. Además, tendrás que devolver las cantidades deducidas en las declaraciones de la renta de los años anteriores.

La multa es de 90 euros en los municipios de 50.001 a 500.000 habitantes, de 60 euros en los de 20.001 a 50.000 habitantes, 3 euros en los de 5.001 a 20.000 personas y de 500 pesetas en los demás municipios.

Multa por no reinvertir en vivienda habitual

Además, se podría aplicar una multa por no cumplir con el plazo establecido. El importe de la multa dependerá de las regulaciones fiscales y las circunstancias específicas de cada caso, pero en general se considera que es una cantidad equivalente al 20% del impuesto debido.

Domicilio: lugar que la ley establece como asiento de una persona, con vistas a la producción de efectos jurídicos; ej. el domicilio de un militar en actividad está en el lugar donde fue destinado. - Residencia: es el lugar donde habita normalmente, es la situación de hecho.

Para saber su régimen fiscal debe ingresar a la pagina del SAT y dar clic en Trámites. Se abrirá otra pantalla en la que deberá dar clic en "Servicios" y posteriormente en "Reimprime tus acuses y genera tu Constancia de Situación Fiscal con CIF".

Desde la opción "Cambio del domicilio fiscal" podrás modificar los datos del domicilio fiscal que consta en el censo. Mediante esta opción, el cambio en la base de datos es inmediato, a diferencia de lo que ocurre con otros trámites.

Domicilio fiscal y la declaración de la renta

El domicilio fiscal debe estar perfectamente cumplimentado en la declaración de la renta. En este caso, al ser la residencia habitual, afecta a aspectos como la deducción de vivienda habitual o las deducciones por hijos convivientes a cargo.

A los efectos de este Impuesto, se entenderá por vivienda habitual, aquélla en la que el contribuyente resida durante un plazo continuado de tres años.

Las segundas residencias o cualquier otro inmueble (garajes o trasteros, por ejemplo) que estén a disposición del titular tributarán en IRPF con el 2% sobre el valor catastral del inmueble que figure en el recibo del IBI.