¿Qué es contractura en el pecho?

Contractura: las contracturas son tensiones (contracciones) permanentes en los músculos que cursan con dolor, rigidez y malestar. Estas también pueden ocurrir en los músculos del pecho o zonas accesorias en conexión, como el cuello, la espalda o los hombros.

Presión, opresión, ardor o presión en el pecho. Dolor aplastante o quemante que se extiende hacia la espalda, el cuello, la mandíbula, los hombros y uno o ambos brazos. Dolor que dura más de unos pocos minutos, empeora con la actividad, desaparece y vuelve a parecer, o varía en intensidad. Falta de aire.

El tratamiento de las contracturas musculares son los antiinflamatorios (ibuprofeno, diclofenaco…) y los relajantes musculares como benzodiacepinas, precisándose en general varios días hasta su remisión. El calor local suave y seco alivia la contractura y ayuda a relajar el músculo.

Como respuesta el cerebro activa la musculatura adyacente para proteger las estructuras sensibles. “Por lo general, son contracturas de carácter rígido y de dolor intenso, pero se resuelven prácticamente solas después 48 o 72 horas.

Dolor muscular en la zona del pecho: este dolor en el músculo pectoral se suele producir después de un esfuerzo o por un golpe. El dolor de un infarto duele incluso estando quieto. Si el dolor es muscular, en cambio, solo dolerá el pecho al moverlo.

Principales síntomas

La contractura muscular suele aparecer cuando el músculo realiza una actividad inapropiada en intensidad o función, así como cuando en el gimnasio se coge más peso del debido puede aparecer contracturas o cuando sin coger tanto peso se realiza un esfuerzo mantenido en el tiempo, como es el caso de una mala colocación ...

La presión en el pecho por ansiedad aparece en un lado del pecho, que suele ser el izquierdo. Hay personas que lo describen como si una flecha les atravesara o como una fuerte sensación de opresión en el pecho por pequeños pinchazos al intentar respirar.

Causas. El espasmo a menudo se presenta en las arterias coronarias que no han resultado endurecidas debido a la acumulación de placa. Sin embargo, también puede ocurrir en arterias con acumulación de placa. Estos espasmos se deben a una contracción de los músculos de la pared arterial.

Si el dolor se acompaña de pérdida de fuerza o alteraciones de la sensibilidad. Si la dolencia impide todo tipo de movimiento o es constante, es decir, no se modifica en función de la postura o el movimiento. Evidentemente, si el dolor está acompañado de otros síntomas, como fiebre, cansancio extremo o pérdida de peso.

Cuándo debes consultar a un médico

La ansiedad, indigestión, infección, torsión muscular, y los problemas cardíacos o pulmonares pueden causar dolor en el pecho. Si tu dolor en el pecho es nuevo, ha cambiado o no tiene explicación, pídele ayuda a un proveedor de atención médica.

Compresas frías

En estos casos, una persona puede tener dolor en el pecho debido a tensión por ejercicios, otras actividades o traumatismo contundente. En cualquiera de estos casos, colocar hielo en el área con una compresa fría es un método ampliamente aceptado para ayudar a reducir la inflamación y detener el dolor.

dolor agudo y punzante. dolor persistente en el pecho. una contracción muscular inusual o un espasmo en el pecho. ardor, entumecimiento o un dolor sordo.

El dolor en el pecho por acumulación de gas es más agudo y punzante, con molestias en la zona abdominal alta. Es inevitable, ante ciertos dolores siempre nos ponemos en lo peor. En el caso de que sea el pecho el que nos moleste, no es raro que se nos pase por la cabeza una misma idea: infarto de miocardio.

El dolor es el síntoma más común al sufrir una contractura de espalda. Sin embargo, el dolor puede variar en intensidad, desde leve hasta grave, y también ser agudo o sordo, independientemente de su intensidad. Por otra parte, puede estar localizado en una zona específica o irradiarse a otras áreas.

Los tipos de contracturas musculares incluyen adherencia, adherencia del tejido cicatricial, contractura mioestática, contractura irreversible y contractura pseudomioestática.

Las contracturas pueden ocurrir en diversas regiones del cuerpo, por ejemplo: pierna, cuello y cervical, y es más común que ocurra después de practicar un ejercicio muy intenso, una noche de dormir mal, mucha tensión en el cuerpo debida a preocupaciones o estrés frecuente.

El tipo más común de contractura es la deformidad por contractura , que es el término general para la contractura de los músculos. Además, existen algunas formas más raras, que incluyen: Contractura de Dupuytren: esta es una condición progresiva que afecta los dedos. Síndrome de Marden-Walker: provoca múltiples contracturas articulares.

No tratar las contracturas conlleva riesgos.

La experta, que distingue que "en función de la musculatura afectada los riesgos varían", avisa de que puede cronificarse la lesión, aumentar la zona de la contractura e, incluso, implicar "ausencia de movimiento del segmento corporal afectado".

Dolor en el pecho repentino y agudo, a menudo acompañado de dificultad para respirar . Falta de aire repentina e inexplicable, incluso sin dolor. Tos que puede producir saliva con vetas de sangre. Latidos cardíacos rápidos con dificultad para respirar.

La tensión muscular es la causa más común de dolor en la espalda alta y pecho. Esto puede deberse a una mala postura (especialmente inclinarse hacia adelante o estar de pie por un tiempo prolongado), el levantamiento excesivo, las actividades que implican torcerse o incluso dormir en un colchón deficiente.

La diferencia es que, cuando los latidos cardíacos adicionales en las cámaras superior e inferior son la causa del ritmo anormal, los síntomas pueden sentirse como un salto inicial o un latido fuerte seguido de un corazón acelerado. Cuando la ansiedad es el desencadenante, la frecuencia cardíaca generalmente aumenta de manera constante en lugar de repentinamente.

Normalmente, durará entre 5 y 10 días si se sigue un buen tratamiento, aunque, lógicamente, la duración dependerá de la gravedad de la contractura.

El reumatólogo es el médico internista del aparato locomotor, es decir, el especialista que diagnostica y trata las alteraciones que se han producido sin la existencia previa de un traumatismo de músculos, tendones, ligamentos, huesos y articulaciones.

La duración de una contractura puede ser de entre cinco y diez días.

Tratamientos de contracturas no quirúrgicas.

Terapia física . Yesos y férulas para mantener la articulación extendida. Medicina para relajar las articulaciones. Bloqueos nerviosos para adormecer la articulación afectada.

El dolor en la parte central o izquierda del pecho puede indicar que se está sufriendo un infarto. Opresivo, punzante, pinchazo, quemazón... El dolor en el pecho o torácico es uno de los motivos de consulta más frecuentes en los servicios de urgencias.