¿Qué es la oxitocina en la música?

¿Qué es lo que pasa en nuestro cerebro cuando escuchamos música? La música genera en nosotros oxitocina, una hormona relacionada con el vínculo que puede haber entre dos personas y que puede generarse mediante el canto. Por ejemplo, un bebé se puede sentir conectado emocionalmente con un adulto cuando este le canta.

Un estudio reciente ha demostrado que la escucha de música produce la liberación de dopamina (un neurotransmisor que participa en la detección de estímulos placenteros y recompensantes) en el circuito de recompensa.

La oxitocina es una hormona que promueve los vínculos sociales y la confianza en los humanos (Kosfeld et al., 2005). Se especula que esta hormona también es responsable de los efectos sociales de la música, sin embargo, esto aún está por investigarse (Chanda & Levitin, 2013).

Varios estudios han examinado la oxitocina endógena durante la producción y percepción musical. Postoperative patients listening to relaxing music through headphones demonstrated an increase in serum oxytocin and reported higher levels of relaxation compared to a control group with no music (Nilsson, 2009).

Hay estudios que han demostrado que las personas al escuchar música de su agrado, su cerebro libera una sustancia química llamada dopamina que es un Neurotransmisor que es especialmente importante para la función motora del organismo y tiene efectos positivos en nuestro organismo, te hace sentir bien.

Música y estado de ánimo

El sistema límbico, que participa en el procesamiento de las emociones y el control de la memoria, se "ilumina" cuando nuestros oídos perciben la música. Los escalofríos que sientes cuando escuchas una pieza musical particularmente conmovedora pueden ser el resultado de la dopamina, un neurotransmisor que desencadena sensaciones de placer y bienestar .

Un melómano es una persona que demuestra una pasión muy grande o una devoción muy intensa por la música, especialmente por la música clásica o académica. Dicha palabra deriva de melomanía, que se considera una afición o inclusive un fanatismo desmedido por la música.

Escuchar o tocar música en vivo estimula tu nivel de oxitocina, lo cual es extremadamente importante ya que te ayuda a vincularte y confiar en los demás, una lección integral que se debe aprender en la vida. Existe evidencia de que la oxitocina liberada durante la música puede hacer que las personas sean más generosas y dignas de confianza.

La hormona está directamente relacionada con el placer y el afecto, ya que ayuda al cerebro a sentir cariño por las personas que componen nuestro entorno, permitiendo sentir hacia ellas lo que no sentimos hacia los desconocidos.

Efectos colaterales de la oxitocina sintética

Mayor frecuencia de hipertonía del útero. Mayor riesgo de rotura de útero (especialmente en mujeres con cesárea previa). Mayor riesgo de sufrimiento fetal. Mayor riesgo de hemorragia posparto.

Cosas tan sencillas como reír, pasar tiempo con nuestros seres queridos, tener relaciones sexuales, meditar, tocar a nuestra mascota, dar abrazos, llorar o ser generoso son algunos de los métodos naturales que nos ayudarán a producir más oxitocina.

La oxitocina disminuye la actividad del sistema nervioso simpático y del eje hipotalámico-hipofisario-suprarrenal, lo que aumenta los niveles endógenos de opiáceos e induce efectos anti-estrés, como: baja tensión arterial, ritmo cardiaco y hormonas del estrés, bienestar y relajación, además de una óptima ...

A través de la sangre llega a todas las células del cuerpo, pero solo actúa, como hormona, en dos órganos diana: la glándula mamaria y el útero.

Las melodías con vibraciones más cortas, mayor ritmo y notas más ágiles provocan un estado de alerta constante, propicio ara el aprendizaje activo, como la Sinfonía Praga y el Concierto para violín y orquesta número 5 en la mayor de Mozart; el Concierto número 1 para piano y orquesta en sí sostenido de Beethoven, todos ...

Música clásica:

siempre se suele recomendar la música clásica para el estudio. De hecho, se dice que algunas composiciones de Mozart estimulan el cerebro y relajan de manera formidable para mejorar la memorización y la adquisición de conocimientos.

La música estimula

Escuchar o tocar música nos ayuda a concentrarnos, favorece la memoria, pero además estimula varias áreas del cerebro y la producción de: Óxido nítrico, una sustancia vasodilatadora. Libera serotonina. Ayuda a reducir los niveles de cortisol, hormona responsable del estrés y la ansiedad.

Ciertas piezas musicales pueden recordarnos eventos, experiencias y personas pasadas, desencadenando recuerdos y emociones asociadas. En otras ocasiones, podemos sentirnos desconcertados ante la grandeza o la pura belleza de la música.

La música ejerce una poderosa influencia sobre los seres humanos. Puede mejorar la memoria, aumentar la resistencia a las tareas, mejorar el estado de ánimo, reducir la ansiedad y la depresión, evitar la fatiga, mejorar la respuesta al dolor y ayudarle a hacer ejercicio de forma más eficaz.

Uno de los beneficios más importantes de la música es su capacidad para crear un sentido de pertenencia entre las personas. La música se ha relacionado con la formación tanto de cercanía social como de vínculos familiares . Los niños suelen tener gustos musicales diferentes a los de los adultos y la utilizan más para vincularse con sus amigos.

Es fácil: "melómano" es aquel sujeto fanático de la música. Se trata de una persona que siente un amor apasionado y, según el punto de vista, excesivo por lo musical, dedicando tiempo y dinero al disfrute de este arte.

Resumen: La anhedonia musical , una condición neurológica donde las personas no disfrutan de la música, afecta al 5% de la población. Los investigadores están explorando si esta misma condición también podría ser lo que perjudica los vínculos sociales en algunas personas en el espectro del autismo.

Para algunas personas, la anhedonia musical es un rasgo que dura toda la vida, mientras que en otros casos puede ser una respuesta a un trauma o un síntoma de trastornos como la depresión (“no es un trastorno en sí mismo”, aclara el profesor Scott). ser algo que cambia con el tiempo o algo con lo que estás estancado.

Aunque, desafortunadamente la oxitocina no se encuentra en los alimentos, sí que existen investigaciones sobre algunos tipos de alimentos que podrían estimular su producción: romero, eneldo, tomillo, perejil, hinojo, hierbabuena, chocolate y leche animal.

El estrógeno es responsable de la excitación, de la sensación de bienestar y plenitud, entre otras funciones.

Por ejemplo, durante la eyaculación los hombres desprenden un cóctel de sustancias químicas dentro del cerebro entre las que se encuentra la oxitocina. Estas sustancias químicas pueden intensificar los vínculos afectivos en la pareja, lo que ayuda a las parejas a alcanzar un fuerte grado de intimidad y entendimiento.

Por tanto, ante niveles bajos de oxitocina, el sistema mesolímbico podría presentaría una menor activación y una consecuente disminución de la motivación para interactuar y de la calidad del apego.

Sí, pero las mujeres suelen tener niveles de oxitocina más altos que los hombres . (Después de todo, es una hormona clave involucrada en el parto y la lactancia). Dejando a un lado las diferencias biológicas, hombres y mujeres parecen experimentar la oxitocina de muchas de las mismas maneras.