¿Qué es lo mejor para limpiar el suelo?

Es un suelo que no debéis mojar con frecuencia ya que puede dañarse. La forma más eficaz de fregarlo es utilizando una fregona con agua y detergente diluido. También un paño humedecido con jabones líquidos o vinagre. Para eliminar las huellas de los pies, podéis usar alcohol blanco o trementina.

Con vinagre o limón dejaremos el suelo reluciente. Con el paso del tiempo el brillo que tenía el suelo al principio se va perdiendo. En lugar de utilizar productos químicos podemos coger de nuestra cocina el vinagre que utilizamos para ensaladas o un limón. Diluyéndolo en agua, ya podemos fregar nuestro suelo.

Existen múltiples opciones: aspiradores (de trineo, tipo escoba, robots), cepillos para barrer, fregonas (de microfibras, algodón), mopas… Además, de cada modalidad se comercializan diferentes modelos. Te descubrimos cuáles son los mejores.

Los parquets de tonos oscuros, los más limpios

Como acabamos de ver, los parquets de color oscuro son la mejor opción si lo que queremos es tener un suelo limpio el mayor tiempo posible. Los tonos oscuros son los mejores para disimular las manchas, por lo que puedes elegir entre marrones, ocres o beiges oscuro.

Vierte abundante agua fría o tibia en el cubo y echa el jabón (neutro) o lejía con detergente. Sumerge la fregona, ya sea de microfibra o tela, ponte los guantes y frótala con fuerza y aprovecha para quitar los restos de basura o pelos.

Lograrás dar brillo a baldosas antiguas si las limpias con una mezcla de vinagre y agua. Prepara un cubo con 4 litros de agua y añade un cuarto de taza de vinagre blanco. Después de barrer, friega con esta mezcla y verás que poco a poco va recuperando el brillo.

Barrer y fregar el suelo

Al barrer o fregar, mueva la escoba o fregona lo más cerca posible de sus pies (1) y hágalo tan solo por el movimiento de los brazos, sin seguirlos con la cintura, asegurándose de que su columna vertebral se mantiene constantemente vertical y no inclinada (2).

Uno de los remedios más efectivos y naturales es el uso de bicarbonato sódico mezclado con agua. Elimina los malos olores y también la suciedad incrustada si añadimos también limón. Además, no deteriora los suelos y los protege contra bacterias y agentes externos.

Para que vuelva a brillar

Prueba, por ejemplo, a limpiarlo con jabón neutro y amoniaco y después aplicar aceite de linaza frotando con un trapo. Otra opción es añadir al agua de fregar un poco de cera líquida para terrazo.

Esto, si nos limitamos a azulejos de baño color blanco, el que se suele elegir como el más higiénico y más fácil de limpiar.

El color del suelo no afecta el comportamiento y uso del suelo; sin embargo, puede indicar su composición y dar pistas sobre las condiciones a las que está sometido. ​ El suelo puede exhibir una amplia gama de colores: grises, negros, blancos, rojos, marrones, amarillos y verdes.

En cuanto al desgaste o la suciedad, hay que tener en cuenta que tanto los pavimentos muy claros como los muy oscuros tienden a ser más sucios que los que tiran hacia la gama media.

Por otra parte, recomienda utilizar agua fría para fregar, porque con la caliente "se evapora el cloro y encima desprende más gases, por lo que te puedes intoxicar". Las labores de limpieza son una obligación ineludible que hay que llevar a cabo de manera frecuente, para mantener el hogar en buenas condiciones.

Una vez por semana. Aspira cada tres días y friega el suelo una vez por semana. Solo con agua caliente ya es efectivo, aunque puedes añadirle un chorrito de vinagre para desinfectar y que tenga más brillo. Evita el exceso de agua, escurriendo bien la fregona al fregar.

Usar la misma fregona para toda la casa

Por eso, lo ideal sería que tuvieras una fregona para la cocina, otro para el lavabo y otra por el resto de la casa. Y si tienes un animal de compañía que ensucia, no estaría de más que tuviera el suyo propio.

¿Qué es lo mejor para limpiar azulejos? Lo mejor para limpiar azulejos es utilizar vinagre de limpieza, sobre todo porque conseguirá eliminar los restos de cal que tanto cuesta quitar. Si no tuvieras también puedes usar vinagre blanco de la despensa.

Hay productos antical especializados, pero también un truco de toda la vida: vinagre y limón. Un vaso mediano de vinagre y el jugo de medio de limón disueltos en medio litro de agua fría. Se aplica por la zona con una esponja, que actúe durante cinco minutos y se retira con un trapo húmedo.

En un barreño añade agua caliente y una parte de vinagre blanco por cada tres de agua. Mezcla bien y usa una bayeta o una esponja humedecida con ello para frotar toda la superficie a limpiar. Una vez termines, repasa los azulejos con una bayeta empapada en agua limpia. Después, seca la superficie.

Los suelos o las encimeras de estos materiales podrían corroerse y dañarse con el vinagre u otros productos ácidos. Por lo tanto, al lavar los suelos de piedra natural es esencial utilizar detergentes neutros, es decir, con un pH de 7. Pero no sólo estos suelos tienen pánico al vinagre.

A la hora de barrer una superficie, es recomendable no barrer hacia uno mismo, sino hacia un lado, poniendo cuidado en no pisar la suciedad acumulada ni pasar junto a ella provocando pequeñas corrientes de aire que puedan dispersarla.

Al barrer o fregar, mueva la escoba o fregona lo más cerca posible de sus pies (1) y hágalo tan solo por el movimiento de los brazos, sin seguirlos con la cintura, asegurándose de que su columna vertebral se mantiene constantemente vertical y no inclinada (2).

Cómo limpiar los pisos de cerámica para que brillen

Primero, prepara un barreño con agua e introduce amoniaco. El amoniaco es su producto estrella desengrasante que hará que las juntas del suelo queden blancas. A continuación, frota las juntas del suelo con ayuda de un cepillo para eliminar la suciedad y desinfectar toda la superficie. Seguidamente, deja secar el suelo.

Cómo limpiar el suelo de baldosas sin químicos

Una excelente opción es el polvo de jabonera orgánico, un detergente vegetal hipoalergénico y biodegradable. Para limpiar las juntas de las baldosas, que es donde se suele acumular más suciedad, puedes utilizar bicarbonato de sodio.

Cómo quitar manchas del suelo de terrazo

La manera más sencilla de hacerlo es con un trapo mojado en agua y jabón: puedes usar el mismo con el que has fregado. Frotando la zona manchada del suelo con este trapo lograrás hacer desaparecer la mancha, pero hazlo suavemente para no dañar el terrazo.

Los ocho pasos esenciales para una limpieza en profundidad

Primero, prepara un barreño con agua e introduce amoniaco. El amoniaco es su producto estrella desengrasante que hará que las juntas del suelo queden blancas. A continuación, frota las juntas del suelo con ayuda de un cepillo para eliminar la suciedad y desinfectar toda la superficie. Seguidamente, deja secar el suelo.