¿Qué es mejor hacer ejercicio en la mañana o en la noche?

El rendimiento físico es mejor. Según las últimas investigaciones, quienes hacen ejercicio por la noche tardan hasta un 20% más en llegar al punto de agotamiento. Es decir, la fuerza muscular, la flexibilidad y la resistencia son mejores por la noche que por la mañana. Se necesita menos calentamiento.

SELF Magazine ha realizado investigaciones que demuestran que es bueno hacer ejercicio en la noche para aumentar masa muscular porque puedes resistir 20% más y con mayor intensidad. Así que, podrás hacer entrenamientos cardiovasculares y de fuerza con mayor efectividad.

En él se aclara que el mejor momento es la tarde y las primeras horas de la noche. En ese momento, nuestra temperatura corporal es más elevada, consumimos menos oxígeno y tenemos más fuerza, lo que se traduce en un mayor consumo de calorías durante la actividad.

Pros de hacer ejercicio en la noche

Si haces este tipo de ejercicios tranquilos y relajantes, puedes reducir la ansiedad y el estrés, regular tu reloj interno y ritmo circadiano, inducir un sueño profundo y segregar serotonina, la hormona de la felicidad, la cual hará que vayas más feliz y menos preocupada a la cama.

Motivación matutina: Los beneficios de hacer ejercicio por la...

Según una revisión de 2020 en el Journal of Sports Medicine, se recomienda practicar un entrenamiento de intensidad moderada en ayunas antes de iniciar un entrenamiento más vigoroso (sin haber comido antes) para prevenir la hipoglucemia.

Para la mayoría de los adultos sanos, el Departamento de Salud y Servicios Humanos recomienda estas pautas de ejercicio: Actividad aeróbica. Hacer al menos 150 minutos de actividad aeróbica moderada o 75 minutos de actividad aeróbica intensa a la semana, o una combinación de actividad moderada e intensa.

Lo aconsejable es hacer deporte unos 2 o 3 días a la semana. En caso de que seas una persona con un buen nivel, que ya lleva unos años entrenando puedes practicar deporte entre 4 y 5 días a la semana siempre y cuando tengas en cuenta el nivel de intensidad de los ejercicios.

Se recomienda hacer actividades físicas que fortalecen los músculos al menos dos días por semana.

También deberás interrumpir la práctica deportiva si te notas cansada o mareada, si tienes cefaleas, dolor de cabeza persistente, alteraciones de la visión, palpitaciones (fuertes latidos del corazón) o si sientes que te falta el aire.

Ejercicios que puedes hacer antes de dormir

“Los músculos necesitan un periodo de recuperación y el mejor momento es por la noche ya que es cuando funciona la hormona de crecimiento. Así, si la intensidad del entrenamiento es alta, las horas de descanso recomendadas pueden variar entre 10 y 12 horas.

El ejercicio matutino inicia programas genéticos en las células musculares, haciéndolos más efectivos y más capaces de metabolizar el azúcar y la grasa. El ejercicio nocturno, por otro lado, aumenta el gasto de energía de todo el cuerpo durante un período prolongado de tiempo".

Despertar temprano, hacer ejercicio y continuar con la jornada hará que el desgaste físico durante el día sea mayor. En consecuencia, la persona estará activa durante el día y cansada cuando llegue la noche, evitando problemas de sueño como el insomnio.

En resumen, ¿entrenar por la mañana es bueno o malo? No te preocupes, no es malo. En la mayoría de los casos es igual de bueno que entrenar por la tarde-noche. Y, obviamente, ¡mejor que no entrenar en absoluto!

Al contrario de lo que puedas pensar, entrenar por la mañana no te deja cansado para el resto del día. Realizar ejercicio a primera hora activa tu organismo y mantiene niveles estables de energía para todo el día.

Además, antes de lanzarte a hacer deporte sin haber comido, debes tener en cuenta tu estado de forma. No obstante, entrenar en ayunas también puede producir efectos negativos en tu salud: fatiga o pérdida repentina de energía, por ejemplo.

De hecho, varios estudios recopilados en la Revista de Endocrinología Clínica y Metabolismo (JCEM, por sus siglas en inglés) sobre el deporte en ayunas confirmaron que no comer nada antes de practicar una actividad física puede multiplicar la pérdida de grasa.

Según una revisión de 2020 en el Journal of Sports Medicine, se recomienda practicar un entrenamiento de intensidad moderada en ayunas antes de iniciar un entrenamiento más vigoroso (sin haber comido antes) para prevenir la hipoglucemia.

Repetir el mismo ejercicio hasta el cansancio no hará que obtengamos mejores resultados que si los repetimos de una forma estimulante y a la vez saludable. De hecho, repetir el mismo ejercicio durante un período prolongado o durante varios días solo aumentará las posibilidades de que te lesiones.

Sí, caminar es el mejor ejercicio para cuidar la salud física y mental según los expertos (entre ellos Harvard), porque es de bajo impacto, ayuda a reducir el estrés y la ansiedad, se queman calorías, y hacerlo después de comer ayuda también a reducir los niveles de azúcar en sangre.

Para adelgazar, se sugiere aumentar la cantidad de actividad aeróbica a 300 minutos por semana. Esto se puede lograr distribuyendo los minutos de ejercicio a lo largo de la semana. Por ejemplo, puedes hacer cardio durante cinco días a la semana, dedicando 60 minutos en cada sesión.

Investigadores y entrenadores coinciden en la respuesta a ese cuánto tiempo necesitas para ponerte en forma o, lo que sería lo mismo, cuál es la duración mínima de un programa de entrenamiento debe ser de tres meses para alcanzar resultados visibles.

Solo 20 minutos de ejercicio al día reducen el riesgo de enfermedades graves, según una nueva investigación. Un nuevo estudio ha revelado que solo 20 minutos de ejercicio diario podrían evitar una visita al hospital.

Lo que ocurre si haces ejercicio todos los días es que podrás bajar tu rendimiento. Primero, debilitarás tus músculos e incluso será más probable que padezcas lesiones. Pero también podrían aumentar tus niveles de ansiedad, estrés e incluso podrías deprimirse u obsesionarte con la actividad física.

6 cosas que debes evitar después de entrenar

Los músculos, tendones, ligamentos, cartílagos y huesos conforman la estructura del cuerpo que está expuesta y reacciona al estrés que causa el ejercicio. Si el estrés aumenta de manera muy rápida, el organismo no puede responder de manera efectiva y se produce una descomposición que requiere un tiempo de reposo.