¿Qué es una cala en la playa?

Una cala es un tramo de bahía redondeada donde penetra el mar. Sus dimensiones son más reducidas a la de una playa y sus aguas suelen ser más tranquilas.

Mientras que la playa es la extensión de tierra y agua, que está completamente abierta al mar y suele tener muchos metros o, incluso, kilómetros de longitud, la cala es una pequeña bahía, que se encuentra recogida entre acantilados o rocas, ya que se forman por la erosión del agua sobre estas formaciones.

La cala (Zantedeschia aethiopica), también conocida como lirio de agua o cala blanca, es una planta acuática perteneciente a la familia de las Aráceas. Es originaria de regiones tropicales y subtropicales, y se encuentra ampliamente distribuida en áreas húmedas alrededor del mundo.

f. Lugar distante de la costa, propio para pescar con anzuelo.

Si una ensenada es una pequeña bahía, a una ensenada particularmente pequeña se la llama cala. ​ Las calas son bahías con forma de concha y pequeñas (de tamaño abarcable).

Formadas por un proceso de erosión que desgasta las rocas más blandas con mayor rapidez que las rocas más duras que las rodean, el paisaje muestra bahías con forma de concha y de tamaño abarcable, a menudo rodeadas de acantilados bordeados por flora salvaje como pinsapos, sabinas y robles.

Una cala, es un tramo de bahía de forma redondeada, de dimensiones más pequeñas a las de la playa y donde sus aguas son más tranquilas.

Generalmente las calas se regalan para expresar pureza, simpatía o reconocimiento. Es un regalo lujoso y elegante, no muy común en todas las floristerías porque tienen el inconveniente de que son flores delicadas y que no viajan bien en los envíos de flores a domicilio.

Cuidados de las calas

Su flor puede permanecer fresca hasta tres semanas en el florero. Para ello como la mayoría de las flores debes de tomar algunas medidas. No las manipules excesivamente. Aunque viajan muy bien son algo delicadas cuando están sueltas.

Una planta sin suficiente agua no tendrá nutrientes para formar tallos fuertes y gruesos. Unos tallos debilitados acabarán doblándose bajo el peso que soportan. En estos casos, la planta necesitará de un riego por inmersión para revivirla si está en maceta, o de uno abundante y frecuente en exterior.

Las calas son flores magníficas: de buen tamaño, fragantes, y fáciles de cuidar. Aunque la más conocida de todas es la que produce la especie Zantedeschia aethiopica, lo cierto es que hay otras de las cuales también es interesante hablar, no en vano, existen 28 variedades, las cuales viven en el sur de África.

La cala es una planta más habituada a los ambientes exteriores. Esas flores consisten en un espádice de dedo amarillo rodeado por una espata blanca brillante con forma de cucurucho o embudo, que brota por encima de un tallo sin hojas. Esa protección que tienen las flores se llaman brácteas.

Para cumplir con los cuidados de las Calas, lo ideal es colocarla en un espacio en el que reciba mucha luz preferiblemente indirecta. Cuidado con esto: aunque su emplazamiento ideal sea cerca de una ventana, no es la mejor idea si vivimos en un clima muy cálido.

Las bahías son más pequeñas que los golfos. Como dijimos al principio, los términos golfo y bahía vendrían a ser esencialmente sinónimos: entradas del mar que quedan rodeadas por tierra. Sin embargo, las bahías son golfos de menor tamaño.

Las calas, o lirios de agua, son unas plantas vivaces y herbáceas de enormes y lustrosas hojas perennes (entre 60 y 120 cm de altura) de color verde oscuro.

Mientras que las primeras son espacios abiertos al mar, las calas son una pequeña bahía que se recoge entre acantilados y formaciones rocosas. Por lo que la sensación de intimidad y privacidad es mucho mayor, tienen un encanto especial. Además, habitualmente son menos turísticas y no se encuentran tan abarrotadas.

Estas plantas vivaces de larga vida gracias a su carnoso rizoma, florecen desde mediados de la primavera hasta octubre, siempre que se les proporcionen un ambiente luminoso, riego suficiente —hay que recordar que al aire libre encuentran su hábitat ideal a la orilla del agua— y poco más.

El método más común de propagación de la cala es la división de sus rizomas carnosos.

La primavera es el mejor momento para plantar las calas si quieres disfrutar de sus preciosas flores en verano. No importa si tienes jardín o no, pues las calas crecen en macetas perfectamente.

La isla de Mallorca cuenta con más de 300 playas y calas repartidas por sus más de 550 kilómetros de costa.

Según el Instituto Nacional de Estadística de España, en el año 2021 Calas de Mallorca contaba con 1 009 habitantes censados,​ lo que representa el 2,25% de la población total del municipio.

Llombards (o es Llombards) es una localidad y pedanía española perteneciente al municipio de Santañí, en la parte suroriental de Mallorca, comunidad autónoma de las Islas Baleares.

En varias culturas, las calas blancas son mensajeras. de buena suerte y se vinculan con la eterna juventud. De esta manera belleza, honestidad y pureza están. relacionadas con el significado de la Cala de flor.

El color de la cala indica el nivel de movilidad que permite al pie una vez lo anclas al pedal. En mi caso siempre he usado Look, que tiene tres tipos: negras, grises y rojas. Las negras son fijas, es decir, una vez haces 'clic' con el pie en el pedal, éste queda fijo.

Zantedeschia aethiopica, conocida comúnmente como cala, cala de Etiopía, aro de Etiopía, lirio de agua, cartucho, alcatraz, flor de pato o flor del jarro, es una planta perenne herbácea de origen sudafricano, de la familia de las aráceas, la más robusta y ampliamente naturalizada del género Zantedeschia.

Las calas son un tipo de planta que puedes almacenar durante el invierno, para poder replantarla en primavera. Piensa que no soportan los clímas fríos extremos, por lo que es mejor desenterrar el tubérculo de la planta y almacenarlo en una bolsa o caja de ventilación, acompañada de musgo de turba.

Riego y abonado de las calas

Así pues, debemos mantener siempre unos niveles de humedad constantes, aunque siempre sin encharcar. Es mejor regar regularmente que inundar la maceta una vez cada muchos días.