¿Qué grosor debe tener un plato de ducha?

Los gruesos de los platos de ducha suelen ser de 3 cm. para los platos extraplanos y de 4 cm. en los platos que tienen un marco perimetral ya que éste está rebajado con un escalón de 1 cm. con lo que el grosor del plato también queda en 3 cm.

En general, la mayoría de las personas señalan que la medida ideal, cómoda y funcional es de 80 x 90 cm. Este espacio permite que ducharse sea confortable y seguro. Ahora bien, siempre puedes inclinarte por la opción de solicitar un plato de ducha personalizado; es decir, que se acople al espacio que tienes.

– En cuarto lugar otro factor relevante es que el plato de ducha tenga un grosor entre 2 cm y 3 cm, el espesor del plato de ducha hace que este sea más robusto y tenga menos problemas de futuras grietas o rotura a largo plazo.

Los platos de ducha de resina son mucho menos resbaladizos que los platos de porcelana o que los platos acrílicos. Dentro de los platos de resina encontraremos que su grado de antideslizante se mide en una escala de 1 a 3, siendo el grado 3 el que menos resbala.

Recuerda que el plato deberá permitir una pendiente de un 2% hacia la válvula aproximadamente. Traza unas guías maestras en el contorno de lo que será el plato y desde todas las aristas para llevar la caída hacia el lugar donde irá el desagüe.

Los colores de platos de ducha más limpios son los colores claros. En estos colores se ve menos la cal y la suciedad. El color blanco, color marfil, color duna, color crema son ideales para mantener por mas tiempo limpio el plato de ducha.

Una de las características más importantes de un plato efecto piedra en tu ducha es su resistencia a la corrosión. El plato efecto piedra no mancha la ducha y resiste el paso del tiempo, intacto en su belleza. Para una limpieza eficaz, basta con: Eliminar residuos después de su uso.

LOS 6 TIPOS DE PLATOS DE DUCHA MAS COMUNES EN EL MERCADO

Lo habitual es que sea corredera. La medida más habitual es de 90×90 cm, pero también puede ser de 80 x 80 cm. No siempre se trata de un plato de ducha cuadrado; también puede ser rectangular, y la mampara de ducha tener una medida de 80 x 100 cm.

Los platos de resina son más cálidos al tacto que la porcelana y su superficie es antideslizante, de modo que resultan mucho más seguros. Y, además, son menos voluminosos y se pueden reparar en caso de impacto o arañazo. Evidentemente, su precio es mayor.

¿Qué material es mejor en un plato de ducha? Cerámica. Fabricados con arcilla, feldespato y arenas silíceas. Es la solución más económica, y ofrece gran resistencia a los productos químicos, ya que su color no amarillea.

El plato de ducha de obra es la mejor opción, ya que este permite acoplarse a cualquier tipo de baño y necesidad, tiene una mejor estética y es más duradero.

Una solución para impedir que salga el agua del plato de ducha, es poner un listón para aumentar la altura y así retener el agua en el área del plato de ducha. Es relevante que al realizar esta instalación la zona esté seca y limpia para que se adhiera bien.

Instala un plato de ducha antideslizante.

En este sentido, la opción más interesante son los platos de ducha de resina. Si tu plato de ducha no es antideslizante, aplica un spray antideslizante, un producto perfecto para las superficies más susceptibles de ser resbaladizas.

Los platos de ducha menos resistentes son los de cerámica. La seguridad: el plato de ducha que elijamos debe ser antideslizante para evitar resbalones y accidentes o contar con accesorios antideslizantes. Los platos de ducha más antideslizantes son los platos de resina.

Una pregunta frecuente es: ¿Qué se pone primero el suelo o el plato de ducha? La respuesta es obvia, antes de la instalación de un plato de ducha, hay que preparar el suelo para poder añadir el plato.

En general, el proceso de reformar un plato de ducha puede llevar entre unas pocas horas y un día completo. Si la instalación es sencilla y no requiere modificaciones importantes en la fontanería o en la estructura del baño, podrás realizar esta tarea en unas pocas horas.

Una ducha a ras de suelo está exactamente al mismo nivel que el pavimento. No es necesario salvar ninguna barrera para estar en el plato de ducha, y tampoco hay que sortear un resalto. La continuidad entre el suelo y el plato de ducha es total.

Cada tipo de ducha tiene sus ventajas y desventajas. Por lo tanto, lo más aconsejable es optar por una opción entremedias – la ducha templada – o bien, disfrutar los beneficios de ambos tipos de ducha. Ésta es la mejor forma de bañarse con agua fría sin sentir frío.

Para personas que su peso sea igual o mayor a 120 kilos deberán instalar platos de ducha porcelánicos o platos de ducha hechos de resina con cargas minerales. Son lo más resistentes y duros para aguantar pesos elevados.

Se tiene que diluir acetona en agua (1:3) (1 de acetona y 3 de agua) y mezclar los componentes sin agitar. Una vez conseguida la mezcla, verter el líquido sobre un paño húmedo y pasar sobre la superficie manchada. Después, dejar actuar de 5 a 10 minutos y aclarar con abundante agua.

Limpia el plato de ducha con vinagre blanco de limpieza

Puedes utilizar una mezcla de partes iguales de vinagre y agua, y aplicarlo durante unos minutos. Después frotar, si es necesario y retíralo con agua abundante.

El granito es uno de las mejores piedras naturales para la encimera del lavabo. Su durabilidad, belleza e infinito abanico de colores y acabados lo convierten en el material más elegido para el baño. Además, al tratarse de un material duro y resistente a golpes o arañazos, su mantenimiento es mínimo.

Los platos de ducha de resina con carga mineral son muy sencillos de mantener limpios. Simplemente debes lavarlos de vez en cuando con una bayeta/esponja húmeda y un poco de jabón neutro que no contenga productos abrasivos.

Presupuesto y ahorro

Por un lado, en caso vivas solo o con pocas personas, una ducha eléctrica será menos costosa y el consumo de electricidad será mucho más moderado. Por otro lado, las termas a gas suelen ser artefactos más costosos, pero su fuente de energía es más barata.

Basta con pasar sobre su superficie una esponja suave húmeda sin estropajo, una bayeta de algodón o un paño de fibra con un poco de jabón neutro. Esto garantizará su limpieza diaria y evitará que se deteriore tanto el aspecto del plato como la capa exterior antideslizante y antibacteriana que recubren a estos platos.