¿Qué hacen las ardillas para defenderse?

Estas ardillas utilizan diferentes sonidos como el grito, el silbido o el gruñido para comunicarse, defender su territorio o para defenderse contra los depredadores.

Las patas traseras son mucho más grandes y fuertes, ayudándole a saltar e impulsarse. Las ardillas, en las ciudades, viven en zonas verdes donde proliferen las coníferas. Estos árboles les protegen muy bien y sus ramas son muy resistentes, siendo un hogar perfecto para estos pequeños roedores.

Las ardillas terrestres son animales conspicuos, diurnos y sociales. Pueden llegar a establecer colonias formadas por cientos de individuos, lo cual es considerado como una estrategia contra la depredación, ya que algunos organismos vigilan la zona, mientras el resto de la colonia realiza otras actividades.

Una ardilla como mascota

Además de inquietas, las ardillas son ruidosas. Chillan y corretean, y pueden llegar a morderte si están de mal humor o en época de hibernación.

Viven en colonias dentro de un sistema de madrigueras donde duermen, descansan, crían, almacenan alimento y evitan peligros. Son activas durante el día, sobre todo desde media mañana hasta avanzada la tarde, especialmente durante días cálidos y soleados.

No olvides que las ardillas son animales nerviosos y activos y que el mejor lugar en el que pueden vivir es la naturaleza. Para que puedan vivir felices como mascotas, debes cuidar bien su alimentación y ofrecerles un sitio adecuado, con mucho espacio y posibilidad de escalar, trepar y saltar, lo que más les gusta.

Cuando llueve, las ardillas se refugian debajo de las hojas y enrollan sus colas para evitar la lluvia. También se observaron ardillas construyendo nidos con desechos plásticos.

Sus dientes no dejan de crecer en toda su vida, por lo cual deben limarlos constantemente. Son animales diurnos, con excepción de las ardillas voladoras, y son muy sensibles a los cambios de temperatura así como a los climas extremos, algunas hibernan con el frío o permanecen prácticamente inactivas con el calor.

Es un mamífero de pequeño tamaño, su cuerpo es alargado y estrecho, con una larga cola de aspecto esponjoso y muy poblada de pelo. Puede medir entre 19 y 24 cm., a lo que hay que añadir la cola que mide entre 15 y 20,5 cm. Su peso varía entre los 186 y los 357 gramos.

Usa plantas aliadas: Disuadir a las ardillas rodeando tu parcela con variedades de plantas es una buena idea, a su nariz no les gusta los olores como las capuchinas, caléndulas, menta o mostaza.

Especias como la cayena o la pimienta negra, rociadas alrededor de las áreas donde has visto ardillas, ayudará a disuadir a estos roedores de merodear por la zona.

A partir de lo que acabamos de explicaros tenemos que decir que las ardillas grises, rojas y las del tipo zorro duermen en nidos que construyen empleando ramas y palos, que rellenan con musgo, tiras de cortezas de árbol, hierba y hojas.

Habitante habitual de los bosques de coníferas, aunque también está presente en otras formaciones arbóreas, la ardilla necesita 14 horas al día de descanso.

Las ardillas terrestres son animales conspicuos, diurnos y sociales. Pueden llegar a establecer colonias formadas por cientos de individuos, lo cual es considerado como una estrategia contra la depredación, ya que algunos organismos vigilan la zona, mientras el resto de la colonia realiza otras actividades.

Los machos inician la hibernación a mediados de junio, pero tanto las hembras como los más jóvenes hacia finales de agosto o principios de septiembre. En abril empiezan a emerger los machos, ya que las hembras se activan cuando la nieve ya se está derritiendo.

Algunas de las frutas que puede comer tu roedor son manzana, plátano, uvas, fresas, cerezas, melón o melocotón, entre otros. Se debe prestar atención a las pepitas de las frutas ya que, por ejemplo, en la manzana no se recomienda su ingesta.

La ardilla puede efectuar saltos de hasta cinco metros; acrobacias que realiza gracias a sus cualidades físicas, a que calcula muy bien las distancias y a que utiliza como balancín la cola y las extremidades.

También necesitan ramas para trepar, cortezas donde ocultarse, tubos de cartón y una rueda grande para ejercitarse. Las ardillas toman mucha agua, así que coloca un bebedero de botella como los de conejos y cobayas.

Las zarigüellas y ardillas buscan huecos en árboles, madrigueras y se ocultan bajo los troncos.

Las ardillas establecen su nido en los huecos de los arboles o en un hueco del ramaje, y en ocasiones, en los nidos desocupados de algún grajo (pájaro parecido al cuervo), urraca o ave de rapiña.

“En los días calurosos, las ardillas se mantienen frescas saltando (estirándose) sobre superficies frías para reducir el calor corporal”, explica el departamento. "A esto se le llama descarga de calor".

En España ocupa de manera continua la región euro- siberiana, desde Cataluña a Galicia, y el Sistema Ibérico septentrional. Notable aumento del área de distribución en Galicia donde en los años 80 sólo habitaba los Ancares y la linde con Asturias.

Se desplaza "planeando". Trepa hasta lo alto de un árbol y salta, con las patas y el patagio (el pliegue de piel que va de la muñeca hasta el tobillo) extendidos, deslizándose en una curva descendente hasta llegar al otro árbol. Al final de su desplazamiento, se coloca hacia arriba y cae parada en el árbol contiguo.

Es un sustantivo epiceno, es decir, con un único género gramatical (femenino) designa a ambos sexos. Para distinguir uno de otro debe emplearse un modificador: ardilla macho o ardilla hembra.

La esperanza de vida de las ardillas en libertad, es de aproximadamente 6 años, pudiendo vivir en cautividad por espacio de 10 años.

Las ardillas adultas pueden vivir entre 5 y 10 años en libertad. Algunas pueden sobrevivir de 10 a 20 años en cautividad.