¿Qué hacer en caso de onda de calor?

Consejos para enfrentarse a una ola de calor

Correcta actuación ante un golpe de calor

Para bajar la temperatura es necesario aplicar frío: en una bañera, una ducha con agua fría, con toallas húmedas sobre la cabeza, el cuello, las axilas y la ingle o abanicando mientras se le rocía con agua.

Para evitar estos cuadros es importante:

Si tras echar una mano los síntomas no remiten, será necesario llamar a urgencias. Por lo general, los golpes de calor no duran más de 6 horas. Si se prolongara, podría provocar daños graves. Y si no se tratara, podría alargarse hasta las 24 horas y provocar la muerte.

10 alimentos que van a contribuir, y mucho, a mantenernos hidratados:

Durante un golpe de calor la piel está caliente, enrojecida y, en ocasiones, seca. Puede haber sudoración o no, a pesar del calor. Debido a la alteración cerebral, la persona puede manifestar confusión y desorientación, y puede tener convulsiones o caer en estado de coma.

La lipotimia por el calor (térmica) ocurre cuando una persona se desmaya repentinamente y pierde el conocimiento debido a la presión arterial baja.

Síntomas de la insolación

Síncope de calor es un episodio de desmayo (síncope) o mareos que ocurre generalmente con estar de pie por mucho rato o repentino ascenso desde una posición sentada o acostada. Factores que pueden contribuir al síncope de calor incluyen deshidratación y falta de aclimatación.

El golpe de calor se asocia frecuentemente con complicaciones hemorrágicas por activación del siste- ma de coagulación/fibrinólisis,15 las que varían desde petequias y equimosis, hasta el desarrollo de diátesis hemorrágica y coagulación intravascular diseminada.

- Lleve a la persona a un lugar fresco y en posición semisentada para favorecer la respiración. - Procure que beba agua a pequeños sorbos. - Para reducir la temperatura corporal, habría que retirarle algo de ropa, darle aire con un abanico o ventilador y utilizar paños con agua fría en la frente, la nuca y el cuello.

Así influye el calor en 5 enfermedades crónicas muy comunes

Ten en cuenta que con el calor aumenta la sudoración, por lo que es básico reponer los líquidos que estamos perdiendo. Si no lo hacemos lo suficiente, podemos deshidratarnos y el dolor de cabeza es uno de los primeros signos de este problema ⁽⁴⁾.

Las causas de las enfermedades relacionadas con el calor incluyen la exposición a temperaturas altas, sobre todo cuando también hay mucha humedad, y la actividad física intensa. Si no se trata de inmediato, el agotamiento por calor puede llevar a un golpe de calor, afección que pone en riesgo la vida.

Los ancianos, niños y enfermos crónicos son particularmente vulnerables a correr el riesgo de deshidratación, agravamiento de enfermedades crónicas o, incluso, un golpe de calor. Asimismo, los deportistas y personas que desempeñan trabajos al aire libre también están más expuestas a los efectos de calor.

Uno de los principales mecanismos hormonales para la regulación de la temperatura se da cuando la glándula tiroidea secreta tiroxina, que se transforma en triyodotironina, la cual se encarga de regular la temperatura corporal al aumentar el metabolismo celular 20.

El centro regulador de la temperatura se encuentra en el hipotálamo, consta de 2 centros y actúa como termostato: el hipotálamo anterior rige la pérdida de calor a través de la vasodilatación de la piel y sudoración cuando se eleve la temperatura del organismo.

Los síntomas frecuentes de alerta de golpe de calor son mareo, aturdimiento, debilidad, torpeza y falta de coordinación, fatiga, cefalea, visión borrosa, dolores musculares, náuseas y vómitos (que también son síntomas de agotamiento). La persona no percibe que su temperatura corporal es muy elevada.

Calambres por calor: Dolores o espasmos musculares que ocurren durante el ejercicio intenso. En general, puede sufrirlos en el abdomen, los brazos o las piernas. Erupciones cutáneas por calor: Irritación de la piel por exceso de sudoración. Es más común en niños pequeños.

Se le conoce como astenia primaveral y se suele traducir en un cansancio crónico. Mientras, en verano las altas temperaturas favorecen la ansiedad. El calor acentúa la sensación de agobio y permanecer en lugares cerrados sin ventilar aumenta los síntomas de la ansiedad.

Dependiendo de su causa, el golpe de calor se puede clasificar como clásico (pasivo) o de esfuerzo. Ambos tipos se derivan de la incapacidad de disipar el calor corporal excesivo, pero sus mecanismos subyacentes difieren.

Cuando desciende la temperatura corporal, el corazón, el sistema nervioso y otros órganos no pueden funcionar normalmente. Si no se trata, la hipotermia puede provocar una insuficiencia del corazón y del sistema respiratorio total y eventualmente a la muerte.

Aumento del apetito y aumento de peso rápido. Sed excesiva y micción frecuente (diabetes insípida) Temperatura corporal baja.

Tiroides: produce hormonas que controlan la rapidez con la que el organismo quema calorías y la frecuencia de los latidos del corazón.

La temperatura corporal normal promedio aceptada es generalmente de 98.6°F (37°C). Algunos estudios han mostrado que la temperatura corporal "normal" puede tener un amplio rango que va desde los 97°F (36.1°C) hasta los 99°F (37.2°C).

Nuestra temperatura corporal es de unos 37 grados, y para que nos quedemos dormidos, nuestro cuerpo debe perder aproximadamente 1 grado.

Consejos para la termorregulación:

1. Aclimatarse. Realizar un periodo progresivo de adaptación del organismo al calor y a las condiciones en las que se va a realizar la prueba.
2. Hidratarse correctamente.
3. Descansar bien.
4. Refrescarse.
5. Vestir adecuadamente.