¿Qué hacer para mantener limpio el baño todos los días?

10 consejos para mantener el baño limpio por más tiempo

El vinagre blanco, la solución de limpieza

Agua y vinagre son suficientes para desinfectar el baño. Vierte una taza con esta mezcla por las paredes interiores del inodoro y deja que actúe durante unos 15 minutos. Pon cuidado en que la escobilla esté bien limpia y repasa el interior.

En general, debes limpiar tu baño a fondo una vez por semana para mantener un nivel básico de limpieza. Sin embargo, también hay otros factores a considerar, como la frecuencia con la que tocas diferentes superficies y cuántas personas viven en tu hogar.

En tres pasos:

Primero, barre el suelo, para eliminar los cabellos o restos que hayan caído. Una vez completado este paso, has de impregnar un trapo en agua caliente con jabón y lejía. Pásalo tanto por el suelo como por las paredes del baño.

El bicarbonato es el producto estrella que con más eficacia puede ayudarte a mantener el baño con buen olor. Venga de donde venga el mal olor, él te lo solucionará.

Gastroenteritis a causa de bacterias como la E. coli y la salmonela, o virus como el rotavirus. Problemas de piel (sarpullidos, picaduras, alergias, entre otros).

La encimera, el fregadero y el suelo los debemos limpiar cada día, ya que es donde más gérmenes y suciedad se acumula. El desagüe y los armarios los deberíamos limpiar una vez al mes, mientras que el frigorífico y la nevera basta con un lavado de cara cada tres o seis meses.

Para mantener un cuidado e higiene eficientes, es importante limpiar suavemente el ano después de las deposiciones, sin frotarse. Acompañar esta acción con agua, toallitas para bebé sin perfume, toallas o papel higiénico húmedo, puede favorecer una limpieza en profundidad que no resulte nada agresiva para nuestra piel.

Trucos para limpiar la ducha

Mezcla dos partes de agua con una de vinagre y otra de jabón. Frota con la ayuda de una esponja este detergente natural para limpiar el aseo, deja que la pasta se asiente y enjuaga después con agua. Tendrás la máxima efectividad anti-gérmenes al instante.

Si quieres hacer las cosas en el orden correcto, primero limpia el polvo y suciedad de los muebles y luego limpia el suelo. Si lo hacemos al revés, es decir, primero el suelo y luego el polvo, los residuos que no se hayan quedado en el trapo de limpieza, caerán al suelo y habrá que limpiarlo de nuevo.

La forma ideal de comenzar a limpiar es de arriba hacia abajo, por lo que debes incluir lámparas, ventiladores de techo, ventanas, muebles y repisas al inicio.

Los ocho pasos esenciales para una limpieza en profundidad

Añade 1 parte de vinagre blanco a 1/2 parte de agua. Pon a hervir la mezcla y remueve ocasionalmente. Echa bicarbonato en polvo dentro de las tuberías y vierte el agua con vinagre hirviendo en el inodoro. Deja actuar por toda la noche.

Hacer cambios en la dieta puede ayudar a prevenir el mal olor de las heces. Por ejemplo, evita beber leche cruda o sin pasteurizar.

El mal olor de las tuberías del baño se puede generar debido a la acumulación de suciedad y residuos que se adhieren a las paredes internas, y a la proliferación de bacterias. A veces pueden ser difíciles de eliminar, aunque hay trucos bastante eficaces.

¿Cada cuánto tiempo hay que limpiar la cocina? Además de realizar un mantenimiento diario y semanal de ciertos elementos, como el suelo o el cubo de basura, será necesario hacer una limpieza general de la cocina, al menos, dos veces al año.

Tip: te recomendamos que entre el lunes y el viernes destines un día por habitación: cocina, baño o dormitorio. Otra opción es hacer una actividad por día: limpiar los pisos, las ventanas, cocina o lavar la ropa.

Una o dos veces por semana

Barrer o pasar la aspiradora en toda la casa. Lavar y tender la ropa. Limpiar el polvo de muebles, mesas y demás objetos. Limpiar los espejos de toda la casa.

Una vez por semana. Aspira cada tres días y friega el suelo una vez por semana. Solo con agua caliente ya es efectivo, aunque puedes añadirle un chorrito de vinagre para desinfectar y que tenga más brillo. Evita el exceso de agua, escurriendo bien la fregona al fregar.

Los gérmenes pueden terminar en el lugar erróneo, lo que podría causar problemas, especialmente en las niñas, ya que puede aumentar el riesgo de contraer infecciones del tracto urinario (ITU).

Hora del baño - Lava la zona con mucha agua, utiliza un jabón especial para la zona íntima y limpia sólo la parte externa, es decir, en la vulva y no en el interior, en la vagina. Utiliza sólo los dedos para limpiar bien, evita utilizar esponjas u otros objetos, ya que pueden causar lesiones.

Vierte en un cazo un poco de vinagre y antes de que hierva, sácalo y mételo en un bote con spray. Rocía ese contenido en la mampara y deja que actúe al menos cinco minutos. A continuación, con un paño húmedo, frota la mampara. Verás cómo las manchas de cal y el resto de suciedad desaparecen.

Amoniaco con agua

Comienza por mezclar el amoníaco con el agua y viértelo en la zona donde está el moho, luego espera unos 10-15 minutos a que actúe y después limpia la zona secando con un paño limpio para eliminar todo rastro de humedad.

La limpieza y la desinfección son fundamentales para mantener una casa libre de polvo, ácaros y gérmenes, y por ende de enfermedades respiratorias e infecciosas.

Primero aspira y luego friega.

No podrás fregar de forma correcta un suelo lleno de polvo, así que siempre deberías pasar primero el aspirador.

Parte importante son los azulejos, mampara de ducha, suelo, muebles (por dentro y por fuera), espejos, baldas y productos. Limpieza de lugares de paso. El recibidor, armario ropero y pasillos también se limpiarán a fondo.