¿Qué hay que hacer cuando te ataca un jabalí?

Aunque es una situación poco probable, si el oso te ataca procura mantener la calma y colócate en el suelo boca abajo o en posición fetal, mantente inmóvil y espera hasta que el animal se haya ido del lugar.

Retírate lenta y silenciosamente. Si estás de excursión y detectas uno o varios jabalíes, intenta darles esquinazo a una distancia suficiente, pero sin huir corriendo. Si no puedes evitar encontrarte con el animal, no hagas movimientos bruscos y, si es posible, refúgiate en un árbol o en un lugar elevado.

"Los jabalíes pueden atacar por cuatro razones: que estén heridos, que se sientan acorralados, por defender a sus crías y porque simplemente es un animal agresivo", ha expuesto.

Llama al 112 y explica lo ocurrido. No te acerques al jabalí ni lo toques, ya que puede estar vivo y atacarte. Espera a que lleguen los agentes de tráfico o los agentes forestales, que se encargarán de retirar el animal y de hacer el atestado.

Normalmente suelen desplazar por la noche. En el caso de encontrarse en la naturaleza con ellos, lo mejor es no salirse del sendero porque pueden reaccionar de forma imprevisible y pueden optar tanto por alejarse como por atacar a la persona.

Según el experto, los jabalíes pueden atacar al ser humano si se da alguna de estas circunstancias: «Primero si se sienten acorralados; también si hay crías pequeñas, porque las madres tienen un comportamiento protector y defensor; y si existe comida de por medio y se compite por ella».

Fuertes e intimidatorios.

Entre los remedios caseros más empleados para espantar a los jabalíes se podrían citar los de poner la radio o programar despertadores que se pongan en funcionamiento en mitad de la noche. Tan solo los sonidos fuertes e intimidatorios les asustan.

Atrayente para jabalí con alquitrán de haya y feromonas

Las hembras en celo son el mayor reclamo para los grandes jabalíes. Por ello este atrayente a base de feromonas de hembra en celo es uno de los mejores reclamos que se llevan utilizando desde siempre entre los aficionados a las esperas.

Con su robusto cuerpo y sus afilados colmillos, los jabalíes pueden parecer animales intimidantes y agresivos. Sin embargo, son pacíficos por naturaleza y normalmente se esconden de los humanos.

Los jabalís son animales de hábitos nocturnos. Durante el día suelen estar escondidos en sus encames y durante la noche muy activos pudiendo llegar a recorrer distancias considerables, que pueden ir desde los 2 a 14 Kilómetros.

Retírate lenta y silenciosamente. Si estás de excursión y detectas uno o varios jabalíes, intenta darles esquinazo a una distancia suficiente, pero sin huir corriendo. Si no puedes evitar encontrarte con el animal, no hagas movimientos bruscos y, si es posible, refúgiate en un árbol o en un lugar elevado.

Si el seguro del vehículo incluye el riesgo de colisión con animales cinegéticos, será éste quien se haga cargo. En caso contrario es el propietario del vehículo el que acarreará con los gastos de la reparación.

Si veis un jabalí montado en bici no debéis increparle, salvo que circule por la acera.

noche puede recorrer distancias considerables, entre 2 y 14 km por noche.

La velocidad a la que pueden correr los jabalíes más veloces supera los 40 km/h, y su resistencia, como prueba este vídeo, les hace capaces de mantenerla cuando huyen del peligro.

De hábitos predominantemente nocturnos, durante el día suele reposar en una especie de cama o pequeña excavación que realiza en el suelo, al abrigo de rocas o matorrales. Su visión es escasa, pero su olfato y oído son agudos.

Podemos usar ultrasonidos, detonadores, aparatos lumínicos y barreras de olor o repelentes para ahuyentarlos de huertos, fincas, plantaciones, jardines o bosques.

Los jabalíes levantan todo a su paso en busca de comida. Las raíces y los insectos que se encuentran bajo tierra suponen un manjar para ellos.

En ideales condiciones de vida la longevidad de un Jabalí fluctúa entre los trece y quince años. Mas son muy pocos los ejemplares que superan los cuatro o cinco abriles, precisamente por ausencia de lo indispensable que para ello es menester.

Hay muchos trucos caseros para ahuyentar jabalís basados en olores: echar pelo humano, colillas de tabaco, naftalina, colgar trapos con colonia, o empapados en orina de lobo sintetizada,… El problema es que estos trucos son de corta duración.

El jabalí tiene una cabeza grande y unos ojos muy pequeños. De hecho, los jabalís ven poco y en blanco y negro. Por eso, compensan su mala vista con sentidos del oído y olfato muy agudizados. El jabalí tiene un olfato muy desarrolladas, cereales, insectos, lombrices, e incluso pequeños reptiles.

El jabalí es de comportamiento muy sociable, no es muy territorialista, y se desplaza en grupos matriarcales, normalmente de tres a cinco animales formados por hembras y sus crías, aunque de vez en cuando se pueden ver grupos superiores a los veinte individuos.

Durante el día es un animal sedentario, que suele permanecer descansando en su madriguera excavada en la tierra. Normalmente las madrigueras de los jabalíes se encuentran en lugares ocultos, con espesa vegetación. Durante la noche los jabalíes se activan y pueden recorrer de unos 2 a 12 kilómetros.

La resina de haya es un producto totalmente natural que no contamina nada. Al jabalí le encanta restregarse contra ella para liberarse de los parásitos que le torturan la mayor parte del año. Si rocías un tronco con ella asiduamente conseguirás crear un punto de referencia para todos los cochinos de la zona.

Sí prefiere el jabalí europeo aquellos lugares en los que poder camuflarse entre la vegetación y donde prime la existencia de agua, ya sea para beber o revolcarse en el barro. Todas estas características hacen de las zonas forestales y los encinares dos de sus hábitats predilectos.

El jabalí durante el día es normalmente sedentario, pero durante la noche puede recorrer distancias considerables, entre 2 y 14 km, normalmente al paso cruzado o al trote ligero (J. Reichholf, 1995), mientras que en las huidas puede practicar un vivo galope, que sin embargo solo puede mantener durante un corto período.

Lo más habitual en la alimentación de los jabalíes son las frutas, semillas, hierbas, raíces o bellotas, que les encantan porque son su manjar favorito. Cuando llega el verano o en zonas áridas, los jabalíes pueden escarbar hasta encontrar raíces que también sirven para su alimentación.