¿Qué importancia tiene el color del refrigerante?

El color llamativo del líquido refrigerante no define sus características técnicas ni sus propiedades. El tono “fosforescente” del líquido refrigerante tiene por misión facilitar la localización de posibles fugas en el circuito de refrigeración gracias al llamativo reguero que deja el líquido vertido.

Si mezclamos anticongelantes de diferente origen, podemos provocar problemas en el circuito de refrigeración, aunque solo sea rellenar o añadir para completar el nivel del vaso de expansión.

Dentro de los refrigerantes, el color azul es el que tiene mejor calidad y el que absorbe mejor el calor del motor, de ahí que también sea el más caro. Lo suelen llevar los coches de altas prestaciones. No obstante, el color del anticongelante más común suele ser el rosa, seguido del azul, el verde y el amarillo.

Si contienen un 10%, su intervalo de temperatura de uso es de -4ºC a 102ºC y es de color azul, si está compuesto por un 25%, su intervalo de uso será entre las temperaturas comprendidas entre los -12,5ºc y los 103º y generalmente es color rosa.

Perfecto para recargar pequeños volúmenes o para drenar y rellenar completamente el sistema de refrigeración.

¿Qué anticongelante lleva mi coche? En algunos vehículos, este dato aparece en el depósito de refrigeración. Si no lo ves en el tuyo, tendrás que consultar el manual de instrucciones del fabricante.

El color de los refrigerantes varía en función de cada marca. Cada fabricante utiliza sus propios códigos de color para diferenciar unos de otros. Generalmente se suele emplear el rosa para los orgánicos y el verde para los inorgánicos.

La proporción de la mezcla agua/anticongelante debe situarse entre 60:40 y 50:50. Esto significa que el vehículo está protegido de una congelación de entre -25°C y -40°C. La proporción mínima de la mezcla debe situarse en 70:30, y la máxima, en 40:60.

Por lo tanto, los fabricantes sugieren reemplazar el refrigerante periódicamente. Se recomienda cambiar el refrigerante después de los primeros 210,000 km (140,000 millas) o 120 meses, luego cada 30,000 km (20,000 millas) o 24 meses.

Para comprobar si el nivel es el correcto, el color del líquido refrigerante, normalmente visible por un tono verde o rosado, ayudará a localizarlo. Tras esto, se debe encender el coche con el recipiente todavía abierto y arrancar el motor.

El anticongelante tiene el mismo objetivo que el refrigerante, pero es aún más resistente al frío, cumpliendo la doble función de refrigerar el sistema mecánico y ayudando al encendido durante el arranque, dado que su punto de congelación es más bajo.

Hoy en día, la cantidad de refrigerante recomendada oscila entre el 40 y el 70 por ciento.

Para la mayoría de los vehículos Peugeot/Citroën, el refrigerante Peugeot que se utilizará será de tipo D. Es aconsejable consultar el manual de usuario del vehículo para conocer las recomendaciones del fabricante.

La prueba del pH del refrigerante proporciona información sobre la acidez del refrigerante. Normalmente para un refrigerante en buen estado de funcionamiento debería estar incluido en 7.5 y 7. Cuando el pH está por debajo de 7, la acidez del líquido aumenta, lo que lleva a un aumento de la corrosión dentro del sistema.

¿Qué riesgos tiene usar solo agua en tu auto? Si se te había ocurrido emplear agua para refrigerar el motor de tu auto, no es una buena idea. Esto se debe a que el agua es corrosiva, por lo que puede afectar a distintas partes del circuito de refrigeración.

El líquido rosa de coche que se ve en las tiendas o en las gasolineras es el llamado anticongelante o refrigerante. Este producto se compone de: Agua. Componente anticongelante que protege al motor del coche del frío.

El líquido refrigerante tiene propiedades de antioxidante y puntos de ebullición superiores a los del agua, ayudando así a que el sistema de refrigeración funcione de manera eficiente. Por esta razón no es aconsejable suministrar agua ni las mezclas entre agua y líquido refrigerante.

Si mezcla uno de estos tipos de refrigerante con otro, debilitará los inhibidores de corrosión del más fuerte.

con el mejor anticongelante rojo de Quaker State.

Es compatible con otros refrigerantes para autos aprobados y recomendado para cambio o relleno del sistema de enfriamiento y/o radiador. Es un anticongelante listo para usar, por lo que debe emplearse directamente sin necesidad de adicionar agua.

El refrigerante Inugel de Motul es ideal para el verano. Es un refrigerante orgánico G12, a un precio muy bueno, y con una gran vida útil.

No refrigerará igual, e incluso una congelación aumentaría el volumen y podría dañar el circuito de refrigeración. El motor se recalentaría y esto podría tener consecuencias fatales, y todo por no gastarte 12 euros, que es lo que te cuesta un anticongelante de calidad.

Cat DEAC (Refrigerante/anticongelante para motor diesel): Es un fluido de servicio pesado para sistemas de enfriamiento diseñado para evitar el congelamiento y el recalentamiento, al mismo tiempo ofrece protección superior de los componentes.

Si no lo cambias a tiempo, te expones a que los defectos en el sistema de refrigeración generen sobrecalentamiento y una grave avería en el motor. Además, si el circuito hermético del anticongelante falla, este líquido irá evaporándose.

El radiador de un auto puede durar hasta ocho años si se mantiene correctamente. Si conduces tu vehículo a diario, debería durar entre 200.000 y 220.000 km. Sin embargo, la vida útil del radiador del auto puede acortarse instantáneamente si no se reparan las grietas lo antes posible.

Diferencias entre el agua y el líquido refrigerante

Absorbe mucho más el calor y tiene el punto de ebullición más alto (el agua lo tiene a 100 ºC). Todo esto permite aumentar la capacidad de refrigeración del sistema evitando recalentamientos y otros problemas.

En todo caso, de usarse, tendría que ser agua destilada. El líquido anticongelante tendrá ventajas frente al agua destilada gracias a los aditivos que decíamos antes. De esta forma se conseguirá que el líquido no se congele hasta unos 30 grados bajo cero, además de elevar el punto de ebullición en unos 20 o 30 grados.

Presión excesiva en el sistema de enfriamiento: Si hay una acumulación de presión en el sistema de enfriamiento debido a un tapón del radiador defectuoso, una manguera dañada o una tapa del radiador que no sella correctamente, el agua del anticongelante puede hervir a una temperatura más baja de lo normal.