¿Qué incluye el precio del kilometraje?

Se refiere al precio medio en locomoción, el cual se divide en dos. El primero es el desembolso de movilidad en transporte público. El segundo es el gasto de movilización en vehículo privado, como combustible, aceite, llantas, seguros, entre otros.

Cómo se calcula el precio del kilometraje

Si la empresa paga el kilometraje a 0,25, tenemos que por este trayecto el trabajador recibirá 100 clean_temp.sh connect_db.sh files_paa_de files_paa_en files_paa_es files_paa_fr models PAA_inserter.sh PAA_master_inserter.sh temp 0.25 = 25 € de compensación que se incluirán en su nómina. De esos 25 € solo tendrá que pagar impuestos por 6 €, por lo que los otros 19 € estarían exentos.

Desde julio de 2023, el kilometraje se paga a 0,26€ por kilómetro recorrido. Hacienda se ha visto obligada a ajustar la compensación debido al aumento de los precios de los carburantes (antes era 0,19€ por kilómetro recorrido).

Aunque no exista un documento interno que especifique el dinero a cobrar por kilómetro recorrido cuando un trabajador utiliza su vehículo particular para hacer un desplazamiento laboral, la mayoría de las empresas paga los gastos de kilometraje.

0,20€ por kilómetro, el precio medio del kilometraje en España. El “Informe Captio del kilometraje 2021” concluye que el promedio del precio del kilometraje bajó hasta los 0,20 euros/km en nuestro país en 2020. Se trata de una bajada significativa respecto a 2019, cuando el precio fue de 0,28 euros/km.

Para los gastos de estancia no hay límites, pero es necesario justificar el importe mediante una factura completa acompañada por un documento en el que se indique el día, el lugar y el motivo del viaje. El objetivo principal es demostrar que el desplazamiento no supera los 9 meses de forma continuada.

¿Cuándo y cómo se pagan las dietas? Cada vez que un empleado tenga que desplazarse fuera de su lugar de trabajo, la empresa está obligada a pagar las dietas laborales, siempre y cuando el Convenio Colectivo se tenga en cuenta, o cuando las dietas tengan cabida en la normativa interna de la compañía.

Por supuesto, tampoco el coche puede pertenecer a la empresa, debe ser propio del empleado. Los empleados que comparten coche no tienen derecho al reembolso de los gastos por kilometraje. Sólo el empleado propietario del vehículo tiene derecho a ello.

En resumen, aunque no hay una cifra exacta que determine cuántos kilómetros se considera desplazamiento, generalmente se trata de aquellos trayectos que superan los 10 kilómetros y que pueden tener un impacto logístico y financiero en la vida del trabajador.

Para ello deberás sumar todos los valores de un año y dividirlos entre el total de kilómetros recorridos con el vehículo durante ese año. El resultado será el gasto real de tu vehículo por kilómetro recorrido.

Se abonarán los gastos de desplazamiento sin necesidad de justificación alguna. Se abonan a razón de 0,19 euros por kilómetro.

Por norma general un coche de gasolina consume un litro por cada 12 kilómetros, que se traduce en un gasto de 4 a 12 litros de combustible cada 100 kilómetros. Esas medidas se verán afectadas dependiendo del vehículo, modelo y tipo de motor.

Aunque las dietas laborales no formen parte de tu salario, el importe debe venir reflejado en la nómina. Concretamente, el importe debería aparecer en la sección “devengos” con el concepto “percepciones no salariales”.

Según la RAE, kilometraje es la distancia en kilómetros. Si aterrizamos esa definición un poco más, podríamos decir que el kilometraje de un coche es la cifra que marca la distancia recorrida en un periodo de tiempo concreto. ¿Dónde se puede ver el kilometraje en un coche?

Como referencia estándar, establece unos gastos en combustible cada 100 kilómetros (con datos de abril) de 9,5 euros para los coches de gasolina, 6,6 euros para los diésel y 7,5 euros para los híbridos convencionales.

Si consideramos que los coches en España realizan una media de 15 000 kilómetros anuales, el coste aproximado es de 2800 € al año o 233 € al mes. Con una vida útil promedia de 20 años, eso se traduce en un coste de 56 000€ a lo largo de la vida del automóvil.

Los pasos para facturar viáticos puede variar de una empresa a otra, pero en general, se deben considerar los siguientes:

¿Cuáles son los gastos de viaje deducibles? Según el artículo 28, sección V, de la Ley del Impuesto sobre la Renta, LISR, los gastos de viaje deducibles son los viáticos que se usen para pagar hospedajes, comidas, renta de autos, transporte o gasolina.

En resumen, estarán exentos del IRPF aquellos gastos que cumplan con los requisitos de la normativa y estén bien acreditados y justificados. Los máximos legales son: Kilometraje exento: independientemente del precio de kilometraje que se pague en ese momento, hasta 0,19 euros por kilómetro.

Gastos de desplazamiento: valor en dinero que se reconoce a los contratistas de prestación de servicios, para atender los gastos de alojamiento, alimentación y transporte con ocasión de su desplazamiento cuando para el desarrollo de sus obligaciones deban desplazarse fuera del domicilio contractual.

Dieta completa, que abarca los gastos de comida, cena y alojamiento y desayuno. Media dieta cuando con ella se financia la comida o la cena. Dieta que cubre los gasto de alojamiento en relación a las pernoctaciones realizadas.

Generalmente, estas son las formas más comunes que usan las empresas para compensar a los trabajadores que viajan:

En este caso, se considera que existe un perjuicio grave para el trabajador y que no puede aceptar el traslado por lo que se puede solicitar la extinción de la relación laboral con una indemnización de 20 días de salario por año de servicio con un máximo de 12 mensualidades y a prestación por desempleo.

Artículo 59.

“Si el desplazamiento se realizase en un vehículo particular del trabajador, se abonará, a razón de 0,26 euros el kilometro el año 2017, 0,27 euros el kilometro el año 2018, 0,28 euros el kilometro el año 2019 y 0,29 euros el kilometro el año 2020.”

Cuando la duración es indefinida o superior a 12 meses, en un periodo de 3 años, estamos ante un traslado. En el supuesto de que el cambio de centro de trabajo no supere los 12 meses, en un periodo de 3 años, estamos ante un desplazamiento.