¿Que le hace la procesionaria a los perros?

Contacto con Procesionaria del pino, síntomas en perros Irritación de patas y zonas que se han puesto en contacto. Irritación ocular. Daños inflamatorios en la lengua de leves a graves. Dificultad para respirar y shock.

¿Qué síntomas tiene un perro si entra en contacto con una oruga procesionaria?

La reacción tras el contacto con la procesionaria del pino es inmediata: se produce hipersalivación, se inflama la lengua y aparece una coloración roja o amoratada, aparecen ampollas con líquido y úlceras que pueden producir pérdidas de alguna parte de la lengua.

Si a tu perro le 'pica' la oruga procesionaria, rápidamente tienes que acudir al veterinario. Las orugas procesionarias provocan una reacción alérgica en los perros, necrosando la zona en la que haya entrado en contacto, llegando provocar su muerte si no se acude inmediatamente al veterinario, impidiéndoles respirar.

Aunque las mariposas de procesionarias se aparean en verano y las orugas nacen entre los meses de septiembre y octubre, es ahora, entre marzo y abril, cuando por fin bajan de los árboles y son realmente peligrosas.

La polilla procesionaria se distribuye por África, Medio Oriente y Europa, teniendo generalmente un ciclo de vida anual. Sin embargo, se ha detectado que, en ciertas regiones de grandes alturas, puede durar hasta unos dos años.

Fase 4: Enterramiento para Crisalidar: Al final del invierno, las orugas que ya han completado su desarrollo larvario, bajan en fila por el tronco del pino para buscar el lugar donde enterrarse y crisalidar., suele ocurrir en los meses de Marzo a Junio.

El producto químico para eliminar la Procesionaria del pino que debes introducir en las inyecciones a aplicar al pino si eres un profesional o si dispones de carnet de manipulador de fitosanitarios es Abamectina 1,8% en una dosis de 3,5 cc. por cada inyección.

¿Qué medidas preventivas podemos tomar?

El producto alcanza el sistema vascular del árbol. El tratamiento se hace solamente una vez, durante la época de la bajada de la tasa de resinación del pino. A la pregunta de ¿cuál es la época en la que aparece la procesionaria?, la respuesta es desde febrero hasta mayo, aunque también tras el verano.

La reacción tras el contacto con la procesionaria del pino es inmediata: se produce hipersalivación, se inflama la lengua y aparece una coloración roja o amoratada, aparecen ampollas con líquido y úlceras que pueden producir pérdidas de alguna parte de la lengua.

Si Ud. ve una hilera de procesionarias en su jardín, rocíela con insecticida y, una vez muertas, deposítelas en una bolsa cerrada y échelas al cubo de la basura. Intente no pisar las orugas con el pie. Los pelos son igualmente urticantes tras la muerte de la oruga.

Endoterapia. Este método es nuestro preferido y consiste en colocar unas inyecciones en el tronco del pino a la altura del pecho. Estas inyecciones introducen un insecticida en el árbol que se va a distribuir por él, envenenando y matando a las orugas cuando se alimenten de las hojas del pino.

Podemos combatir a este insecto con trampas de feromonas, poda de bolsones, tratamientos insecticidas y barreras físicas. La mejor manera de evitar la proliferación de la procesionaria del pino (Thaumetopea pityocampa) son las acciones preventivas.

La mariposa resultante de las larvas de procesionaria es la Thaumetopoea pityocampa, una mariposa nocturna. Éstas harán su aparición a mitad del verano, momento en el que saldrán de la tierra y, tras la cópula, realizarán una nueva puesta de larvas de procesionaria en las ramas de los pinos.

Los depredadores más efectivos de la Procesionaria del pino son los carboneros y los herrerillos, dos aves insectívoras especialmente voraces con estas orugas.

Consiste en la instalación de trampas de feromonas para el control de las poblaciones de procesionaria mediante la captura de mariposas macho. Las actuaciones se realizan en zonas con bajos niveles de infestación, durante el periodo de vuelo de las mariposas que se produce en verano (junio/agosto).

Asimismo, suelen habitar en los pinos o cerca de estos (por esto mismo se conocen como “procesionarias del pino”). En estos árboles es donde dejan sus “bolsones” de color blanco, que son los nidos donde este tipo de animales crecen.

Si el contacto es con la piel con tu perro, producirá en la zona picor, urticaria o sensación de quemazón, quedando la piel afectada en mayor o menor medida y pudiendo ver inflamación en la zona que haya contactado con la oruga.

Síntomas de la picadura de oruga procesionaria

La reacción alérgica al contacto con la oruga procesionaria y con sus tricomas es casi inmediata y el primer síntoma es un intenso picor en el área afectada. Más que picor es casi una quemazón difícil de calmar, que suele ir acompañada de un sarpullido.

Las lesiones urticariformes en ocasiones tienen cierta infiltración, con una morfología de urticaria papulosa, por lo que pueden persistir durante varios días (fig.

La prevención puede realizarse usando enemigos naturales, incluyendo avispas parasitoides. También se pueden usar trampas de feromonas y lámparas atrapa insectos.

Tras el apareamiento, la mariposa hembra pone los. huevos en el reverso de las plantas asclepias o. algodoncillo. Una mariposa puede poner hasta 400.

Además de defoliar y debilitar los árboles, se trata de una plaga que es potencialmente peligrosa para el ser humano. Cada oruga cuenta con unos 500.000 pelos urticantes que se desprenden con gran facilidad y que pueden provocar irritaciones en las vías respiratorias y en los ojos.

Voraces y móviles, las orugas de la nocturna gamma se alimentan de noche y se esconden durante el día. En estado adulto, la oruga puede comer hojas jóvenes y el bulbo. Una vigilancia de vuelos de adultos utilizando trampas con feromonas permite activar en el momento deseado la lucha química.

Este nido de seda blanca natural se encuentra en las ramas de los árboles que más sol reciben. Estos nidos (denominados bolsones) aparecen durante el invierno y tienen aspecto de 'algodón blanco' o 'algodón de azúcar'. Estos bolsones los utilizan las procesionarias para protegerse del frío durante su fase larvaria.