¿Qué libros leer de Jorge Luis Borges?

Prendes y Pérez escogen entre sus favoritos seis de los mejores cuentos de Borges, que nadie debería dejar de leer.

Luciano Lamberti, escritor argentino

Creo que el mejor libro para empezar a leer a Borges es Historia universal de la infamia, que es su primer libro de narrativa porque tiene varias cosas interesantes.

Los especialistas además coinciden que Obras completas es uno los libros más vendidos dado que incluye Ficciones y El Aleph, sus dos obras cumbre, y porque Borges ya era una figura mundialmente consagrada.

Acá, una guía de lecturas para iniciarse en su obra:

En 1949 se publicó uno de los libros más conocidos del escritor argentino, una obra compuesta por diecisiete cuentos cuyo último título da nombre también a la colección completa, El Aleph¹.

Jorge Luis Borges fue un escritor argentino, considerado uno de los máximos exponentes de las letras hispanas del siglo XX gracias a sus cuentos cortos, poemas y ensayos breves, influenciados por la corriente del ultraísmo.

Cuento que trata de la asombrosa venganza de un rey contra otro que lo encerró en un laberinto. La espera, un hombre atormentado por su pasado. El hombre en el umbral, un juez inglés tratando de poner orden en conflictos indios. El Aleph.

Borges se destacó como escritor al tener un estilo literario de cuentos, ensayos y relatos breves, pues sus textos están provistos de una vasta cultura, mundos alternativos, simbolismos, acertijos y metáforas.

“Si por Dios se entiende una personalidad unitaria o trinitaria, una especie de hombre sobrenatural, un juez de nuestros actos y pensamientos, no creo en ese ser. En cambio, si por Dios entendemos un propósito moral o mental en el universo, creo ciertamente en él.

La simbología que utiliza remite a los autores que más le influencian -William Shakespeare, Thomas De Quincey, Rudyard Kipling o Joseph Conrad-, además de la Biblia, la Cábala judía, las primigenias literaturas europeas, la literatura clásica y la filosofía.

Borges, ante todo, se considera lector: "Que otros se jacten de las páginas que han escrito; a mí me enorgullecen las que he leído". De esta manera, todas las etapas vitales transcurren ante un libro abierto y los ojos sólo se apartarán de sus líneas para atisbar las que aún quedan por leer.

"Georgie", como le decían en casa, tenía apenas seis años cuando dijo a su padre que quería ser escritor.

La Gioconda es sin duda la obra más importante de la historia del arte.

Sin embargo, Borges era un humorista discreto, utilizaba un humor conceptual. Su carácter, siempre jocoso y lleno de ironía e imaginación, le llevaron a ser conocido como un autor fantástico.

En el relato de “El Aleph”, Borges nos plantea una crítica al concepto de ser, y la lleva a cabo tratando de ironizar la imagen del Aleph, que a este punto de la cuestión podemos entenderlo como ser fundamento, por lo tanto como realidad total y estática.

El personaje principal de El Aleph es Borges, el alter-ego del propio autor y que genera una sensación de mayor realismo en su texto.

El motivo principal que el mismo Borges sostuvo por toda su vida es que el premio fue negado por razones políticas. No es secreto que Borges era conservador y partidario del antiperonismo durante la época de este mismo gobierno.

Con solo 23 años, Jorge Luis Borges publicó su primer libro: el poemario Fervor de Buenos Aires. A partir de allí, en 1923, comenzó la carrera literaria del gran escritor argentino y uno de los más importantes no solo de la región, sino también de los más celebrados de la literatura castellana.

Forster, Kafka, André Breton, Ray Bradbury, Lovecraft, C. S.

Jorge Luis Borges (1899-1986), uno de los más célebres escritores del siglo xx, padeció de una ceguera crónica, progresiva e incapacitante que jamás fue diagnosticada ni tratada eficazmente pese a contar con el apoyo de los mejores especialistas de su época.

En El Sur (1953), uno de los más consagratorios que ha tenido en su trayectoria, Borges comenzó a despedirse de su vista. Lo hizo dos años antes de haberse declarado completamente ciego. Puso 1955 como fecha simbólica, cuando tenía 56 años.