¿Qué país le compra más gas a Rusia?

Bélgica y España son los principales importadores mundiales de GNL ruso en lo que va de año. Las empresas españolas han aumentado un 71% la compra de este combustible procedente de Rusia en el primer semestre.

Los tres Estados más dependientes del gas ruso son Hungría, Letonia y Eslovaquia, que en 2020 superaron el 80% de compras de gas a Rusia sobre el total de importaciones de este recurso, según la IEA.

Estados Unidos es el segundo proveedor y representa el 20,8% de las importaciones de gas. Si se abre el espectro a los últimos 12 meses —entre septiembre de 2022 y agosto de 2023— se comprueba que Argelia sigue siendo el primer suministrador (24,1%) por delante de Estados Unidos (21,5%) y Rusia (17,9%).

Según los nuevos datos publicados por Global Witness, una organización de vigilancia medioambiental, la Unión Europea compró 21,6 millones de metros cúbicos (mcm) de GNL ruso entre enero y julio de este año, un pequeño aumento en comparación con el mismo periodo de 2022, cuando las importaciones ascendieron a 21,3 mcm.

España compró 22.377 GWh en forma licuada (el 67,3% del total), que es un 14,1% menos que hace un año. Y 10.893 de gas natural (un 7,8% inferior a las cifras de enero de 2021). Las compras totales de gas descendieron un 12,1%.

Un 47 % del gas que consume Suiza procede de Rusia (aunque gran parte de éste llega a través de países vecinos como Francia y Alemania), mientras que Noruega es la segunda mayor proveedora (24 %) y la UE la tercera (19 %).

Hungría, Eslovaquia, Moldavia, Austria y Alemania son las cinco naciones que más gas importan desde Rusia.

Argelia, Estados Unidos y Rusia han sido, por este orden, los principales proveedores de gas natural a España en el primer semestre del año, según el boletín estadístico que publica Enagás.

Argelia se consolida como el primer proveedor de gas natural a España hasta julio, por delante de Rusia.

Argelia se consolida como principal proveedor de gas natural a España en lo que va de 2023, tras haber sido nuevamente el primer suministrador en el pasado mes de julio, con un total de 9.106 gigavatios hora (GWh), para cubrir el 28,7% de la demanda mensual, según datos del último boletín de Enagás.

Los yacimientos de rocas sedimentarias de la zona, sumando a una orografía y climatología proclive al acúmulo del gas han favorecido la creación de los depósitos. Los principales yacimientos se encuentran sobre todo en Siberia occidental, al este del Golfo de Ob, situado en el Círculo Polar Ártico.

Entre sus abundantes recursos naturales se cuentan el petróleo, gas natural (primer productor mundial), carbón, hierro, níquel, aluminio, cobre, uranio, bauxita, oro, diamantes y platino.

Una media de 26 teravatios hora de gas natural al mes llegaron a Alemania desde Noruega entre 2017 y finales de febrero de 2022, según el documento. Tras los recortes rusos, esta cantidad aumentó a 41 teravatios hora.

Nigeria y Estados Unidos fueron los dos principales proveedores de petróleo de España en 2022, por delante de Rusia cuya contribución no llegó ni siquiera al 2%.

España importó más crudo, pero redujo su dependencia de Rusia un 73% en 2022. 2 min. España aumentó un 13,2% sus importaciones de petróleo hasta las 63.596 kt en 2022, un año marcado por la crisis energética provocada por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, país desde el que las compras se redujeron casi el 73%.

Noruega sustituyó a Rusia como principal proveedor de gas de Alemania en 2022, con un tercio de las importaciones.

Algunos pequeños países europeos, como Macedonia del Norte, Bosnia y Herzegovina y Moldavia, dependen exclusivamente del gas ruso. En países como Finlandia y Letonia la dependencia supera también el 90% y el 89% en Serbia.

La situación variaba enormemente entre Estados miembros: la tasa de dependencia se situaba en el 10,5 % en Estonia, en el 63,7 % en Alemania, en el 81,4 % en Grecia y en el 97 % en Malta. El gráfico muestra la tasa de dependencia energética de la UE y de sus Estados miembros.

Rusia. El primer puesto indiscutible en esta lista es Rusia, siendo el país con más gas natural del mundo. En concreto, su reserva asciende a 47.805 kilómetros cúbicos, es decir, casi 18.000 veces más que España.

La causa principal: Rusia ha cortado los suministros de gas natural barato de los que el continente ha dependido durante años para alimentar fábricas, generar electricidad y calentar hogares.

El gas ruso es atractivo para Europa porque suele ser barato, fácil de transportar y casi siempre disponible. Algunos países de la Unión Europea dependen de él porque están cerrando plantas de carbón, y Alemania incluso está planeando el fin de la energía nuclear.

España dispone de interconexiones con Portugal y Francia desde donde envía grandes cantidades de energía. Para este 2022 ya se han realizado las subastas y el resultado es que las interconexiones han crecido un 233%. Gracias a ello, el sistema eléctrico español recibirá 110 millones de euros, el triple del año pasado.

Desde el inicio de la guerra, España ha sido —junto con Francia y Bélgica— la principal puerta de llegada de gas ruso por barco a los puertos europeos. En 2022, las importaciones españolas de este combustible procedente de Rusia casi se han duplicado, hasta superar los 56.000 gigavatios hora (GWh).

El gas natural llega a las Canarias principalmente a través de gasoductos submarinos desde la península ibérica. Estos gasoductos transportan el gas desde la costa española hasta las distintas islas del archipiélago canario. El gasoducto principal que abastece a las Canarias es conocido como Gasoducto Canarias.

Esta estadística presenta la evolución anual de la producción de gas natural en España desde el año 2011 hasta el 2021. En los dos últimos años, el volumen de producción se redujo considerablemente, pasando de 135 millones de metros cúbicos de gas natural en 2019a menos de 40 en 2021.

Rusia posee las mayores reservas de gas natural del mundo, las segundas mayores reservas de carbón y las octavas mayores de petróleo. Es el primer exportador de gas natural y el segundo de petróleo. Rusia también es rica en minerales de hierro, bauxita, níquel, estaño, oro, diamantes, platino, plomo y zinc.