¿Qué palabras pertenecen a la tercera declinación?

Son parisílabas. Ejemplos: sedes, sedis; orbis, orbis; ovis, ovis; nubes, nubis; etc.

I. LA CUARTA DECLINACIÓN

A la 4ª declinación pertenecen sustantivos mayoritariamente masculinos (exercitus, -us), algunos femeninos (manus, -us) y unos pocos neutros (cornu, cornus).

Podemos conocer a qué declinación pertenece una palabra mediante su enunciado. Todo sustantivo se enuncia mediante el nominativo y el genitivo singular. Será este último (su desinencia) el que nos indique a qué declinación pertenece la palabra en cuestión.

Cada tipo de declinación tiene seis casos (a saber: nominativo, vocativo, acusativo, genitivo, dativo y ablativo), y cada uno de estos casos de declinación tiene su forma singular y su forma plural. Definiremos en primer lugar los seis diferentes casos que presentan las cinco diferentes declinaciones.

La tercera declinación engloba sustantivos y adjetivos de tema en consonante, tema en -i y temas mixtos. Los temas en consonante son palabras imparisílabas, es decir, el nominativo y el genitivo singular de las mismas tiene diferente número de sílabas como, por ejemplo, lex, legis (masc.) y caput, capitis (n).

La tercera declinación latina contiene sustantivos de los tres géneros: masculino, femenino y neutro (sustantivos que tienen el nominativo singular acabado en -c, -t, -l, -m o -e). Pero a diferencia de otras declinaciones, los sustantivos de esta declinación se dividen en dos grandes grupos.

Pertenecen a la primera declinación los nombres y adjetivos cuyo genitivo singu- lar es -ae. La mayoría son de género femenino, pero también hay algún nombre masculino.

Tipos: Pertenecen a la 2ª declinación los sustantivos y adjetivos de tema en -o. -er e –ir son terminaciones de la raíz.

Casos y declinaciones 

1. f. Caída, descenso o declive.

La primera declinación, o declinación de los temas en -α, de la misma manera que ocurre en la primera declinación latina, incluye sustantivos en su mayoría de género femenino, y algunos masculinos. Los sustantivos femeninos se agrupan en tres tipos: -α pura, -α impura y -η; los masculinos, en dos: -ας y -ης.

La primera declinación es la declinación de los temas en –a, con genitivo en – ae, como rosa, rosae. La segunda declinación es la declinación de las temas en –o, con genitivo en – i, como populus, -i, sustantivo de género masculino.

(D) = Dativo: el sustantivo al que está destinada la acción del verbo. (G) = Genitivo: el sustantivo que guarda una relación de pertenencia con otro sustantivo.

En el neutro, en cambio, la -n final se mantiene (ej: flumen, fluminis). La consonante de la raíz se mantiene a final del palabra (ej: consul, consulis; mulier, mulieris).

El caso genitivo es el cuarto caso latino. Este caso es el que se encuentra junto con el Nominativo en todo enunciado de un sustantivo latino y de esta forma es de donde solemos sacar la raíz de una palabra para poderle añadir las desinencias casuales, en especial en la 3ª declinación.

Las declinaciones del latín son el conjunto de casos o variaciones en las palabras (sustantivos, adjetivos, pronombres y determinantes) de ese idioma. Es posible diferenciar tres categorías: género gramatical, número gramatical y caso gramatical.

LA CUARTA DECLINACIÓN DEL LATÍN

Ésta es la declinación de los temas en «u» y su marca distintiva es el genitivo singular -us. Como en la tercera declinación, la cuarta tiene dos tablas: una tabla para masculinos y femeninos y otra tabla para los neutros.

La segunda declinación, o declinación temática, es la más sencilla del griego, ya que solo tiene dos tipos: Masculinos y femeninos (nominativo –ος, genitivo –ου) Neutros (nominativo –ον, genitivo –ου)

Los temas en «i» son sustantivos que acaban en vocal «i», de la misma manera que la primera acaba en «a» y la segunda en «o». Pero los temas en consonante son temas que acaban sin vocal al final.

Los sustantivos de la primera declinación se enuncian como terra, -ae. La inmensa mayoría de los sustantivos de la 1ª declinación son femeninos, con las siguientes excepciones en masculinos: - unos pocos nombres de oficio: poeta, -ae: poeta.

El griego tiene tres declinaciones, es decir, tres modelos distintos para declinar los nombres. Cada nombre pertenece a una de las tres declinaciones.

El vocativo es el caso de la persona interperlada: se utiliza para llamar la atención de una segunda persona. Debemos recordar que, excepto los sustantivos en -us de la segunda declinación, el vocativo es siempre igual que el nominativo. Conficior enim maerōre, mea Terentia. Salvē, alumnule.

El latín presenta cinco declinaciones cuyos orígenes se explican en los libros de historia del latín. Para definir un sustantivo y saber a qué declinación pertenece, tenemos dos casos: el nominativo y el genitivo más su género (femenino, masculino o neutro).

Había en latín tres géneros: masculino, femenino y neutro. El romance perdió el género neutro, salvo en el pronombre (lo, esto, eso, aquello) y el artículo (lo).

PLURAL EN SUSTANTIVOS

Comparad las frases: En castellano, hemos añadido una “-s” para formar el plural del sustantivo (marinero > marineros), en cambio, en latín tenemos “-a” para singular y “-ae” para el plural (nauta > nautae).