¿Qué pasa si como semillas en exceso?

Debido a su alto contenido de fibra, un exceso en su consumo puede causar malestar estomacal, hinchazón y problemas digestivos, como diarrea.

Los beneficios que aportan las semillas al organismo son varios: aumentan el colesterol bueno y disminuyen el malo, mejoran el tránsito intestinal y previenen la constipación. También son excelentes aliadas a la hora de perder peso, ya que tardan en digerirse y producen un gran estado de saciedad.

"En esto no hay una recomendación, en el uso diario de semillas ayuda a que nuestra dieta sea un poco mejor en cuanto a contenido nutricional", añade Arranz. La experta apunta que la recomendación ideal de semillas diarias sería como 10-20 gramos al día, es decir, unas 2-3 cucharaditas de postre.

Además de problemas renales, el exceso de fósforo puede provocar pérdida de la densidad ósea y osteoporosis, así como la formación de calcificaciones de vasos, corazón, pulmones, etc. Y finalmente tenemos al selenio, del que las pipas nos aportan 50 mg, cuando la cantidad máxima diaria recomendada son 70 mg.

Como muchos alimentos su consumo excesivo tampoco es bueno para nuestro organismo. Su consumo puede afectar a personas con problemas digestivos como gases o con la enfermedad de Crohn, ya que tomar semillas de chía puede dar problemas de estreñimiento o acumular gases.

Las semillas de sésamo son una de las mejores semillas para la salud. Las semillas de sésamo son una fuente muy valiosa de cobre, calcio, magnesio, hierro, fósforo, vitamina B1, zinc y fibra dietética.

El Dr. Polo Guerrero, médico general, explica que el problema está en la digestión. Una semilla no puede ser digerida en el estómago de igual manera que otros alimentos, por lo que termina llegando a tu apéndice, lo que puede generar eventualmente su inflamación.

Además, ciertamente puedes comer demasiadas semillas. Debido a que contienen una fuente concentrada de grasas y calorías, es mejor disfrutarlos en pequeñas cantidades: de un octavo a un cuarto de taza, tres o cuatro veces por semana . Recomiendo comer sólo semillas orgánicas.

El lino, al igual que la chía, contiene altas cantidades de proteína y de ácidos grasos omega 3. Estas grasas son esenciales para nuestro cuerpo: no las puede producir pero las necesita para funcionar. Además, es una sustancia con gran poder antioxidante, por lo que ayuda a prevenir la aparición de enfermedades.

Puedes excederte cuando se trata del consumo de frutos secos y semillas . "Si comes más de uno o dos puñados de frutos secos al día, estás añadiendo calorías adicionales (tal vez demasiadas) que pueden sustituir a otros alimentos saludables y aumentar de peso", advierte McManus. Piense en términos de porciones pequeñas.

Un exceso en el consumo de pipas de calabaza puede generar problemas en el estómago, flatulencias y diarrea, pues no se debe olvidar el alto contenido en fibra presente en este fruto seco. En algunos casos, las pipas de calabaza han producido alergias en la piel y reacciones como eczemas e irritaciones.

En varias ocasiones la ingestión de nueces y semillas e incluso cocos rallados ha provocado los ataques repetidos más agudos de diverticulitis , marcados con dolor agudo en el lado izquierdo, dificultad para defecar y fiebre.

Puede tener todas las semillas, a saber, semillas de chía, semillas de lino, semillas de girasol y semillas de calabaza juntas . Son una fuente natural de proteínas, fibra y Omega 3. Por lo que no debes preocuparte por las complicaciones de mezclar semillas.

La linaza generalmente se utiliza para mejorar la salud digestiva o aliviar el estreñimiento. La linaza también puede ayudar a reducir el colesterol total en sangre y los niveles de lipoproteína de baja densidad (LDL, o colesterol "malo"), lo cual puede ayudar a disminuir el riesgo de enfermedad cardíaca.

Se aconseja evitar su ingesta en mujeres embarazadas y en período de lactancia. La fibra que contiene esta semilla podría ocasionar distensión de estómago, por lo que es aconsejable consultar con el médico si se tienen problemas estomacales antes de incorporar la linaza a la dieta habitual.

Lo ideal es tomar de dos a tres cucharas al día, mezcladas con agua o con ensaladas, batidos, yogures o pan casero.

Principalmente ayudan a mejorar las articulaciones y a regular la función intestinal. Sin embargo, se deben consumir con moderación ya que su exceso puede llevar a un aumento de peso.

Seis semillas muy nutritivas y beneficiosas para tu salud

7 semillas comestibles que son fuente de energía

Aportan diversos nutrientes como hidratos de carbono, fibra, proteínas, grasas insaturadas (Omega 3), vitaminas del complejo B y E, minerales como el calcio, magnesio, fósforo, potasio, zinc, cobre, manganeso, entre otros.

Puedes tomar chía cocida o con el té

También se podrían añadir al pan o a cualquier producto de repostería que cocináramos en casa como las magdalenas o las galletas. Aquí estaríamos hablando de las semillas de chía enteras, no molidas.

Si estás realizando una dieta para perder peso, también te beneficiará tomarlas por la noche: por un lado te aportarán un efecto saciante que te ayudará a calmar el hambre antes de irte a dormir. Por otro lado, su aporte en algunos minerales te ayudarán a evitar la falta de energía durante este tipo de dietas.

Sí, puedes comer diferentes tipos de frutos secos y semillas juntos a la vez . Actualmente hay paquetes de mezcla de semillas o de nueces disponibles en el mercado. Si no desea comprarlos, puede mezclar nueces y semillas de su elección como semillas de calabaza, semillas de chía, semillas de lino, almendras, pistachos, etc.

La mezcla de semillas de linaza, semillas de calabaza y semillas de girasol está repleta de grandes beneficios para tu cuerpo y también agrega un elemento de textura y sabor a tus platos favoritos . Espolvoréalo sobre tu ensalada del almuerzo o agrégalo a tu tortilla de desayuno para comenzar a disfrutar de los grandes beneficios de esta sabrosa mezcla.

Las semillas de lino y las semillas de chía son beneficiosas para la salud. Si tuviésemos que elegir una, nos quedaríamos con las de chía. En primer lugar por su menor aporte calórico y su mayor contenido en micronutrientes. En segundo lugar, sus mayores posibilidades culinarias.

Contiene grandes dosis de proteínas, grasas poliinsaturadas y calcio, aporta además hierro, zinc y fibra. Estimula la digestión, aumenta la inmunidad natural y es un estupendo reconstituyente.

Puedes tomar una o dos cucharadas después del desayuno y otras después de la cena acompañadas con un gran vaso de agua. Otra opción es añadir las cucharadas a un yogur natural y al acabar tomar un vaso de agua.