¿Qué pasa si despiertas a un oso que está hibernando?

Si despiertas a un oso, pon los pies en polvorosa. El oso se enojará. Espero que puedas correr rápido. Nada, que se despierta se da una vuelta y ve que no hay comida y se vuelve a dormir a no ser que quien lo despierte sirva de comida.

De acuerdo con National Geographic, los osos cuando despiertan de su letargo priorizan alimentarse y pueden entrar en un estado de caza letal para cualquier presa que se cruce en sus caminos, especialmente crías de renos y alces.

"Cuando suben las temperaturas y comienza a haber alimento, los osos empiezan a salir de sus guaridas. Los machos suelen emerger primero, por lo general de principios a mediados de marzo, seguidos de hembras solitarias y hembras con crías de un año o dos años, desde fines de marzo hasta mediados de abril.

Los mamíferos norteamericanos generalmente duermen entre cinco y siete meses sin comer, beber, orinar ni defecar y después emergen de sus guaridas como si nada hubiera ocurrido.

Los osos hibernan después de unos meses ingiriendo grandes cantidades de comida para acumular grasa. Durante los meses de estado de letargo no ingieren ningún tipo de comida, no excretan ni orina ni heces, y se pasan todo el tiempo durmiendo sin a penas moverse.

El oso deja de comer, beber, defecar y orinar y mantiene las constantes funcionales gracias a la energía proporcionada por las reservas grasas acumuladas en otoño. La hibernación viene precedida por la búsqueda de una cueva y su acondicionamiento con una cama de hierbas y ramillas.

El mes de febrero es, para los osos, el del sueño más profundo. Las hembras que paren en esta época entran en las cuevas en diciembre y salen de las mismas el mes de abril. Los ejemplares solitarios suelen ser más "perezosos" a la hora de iniciar la hibernación.

Hibernar es un verbo que designa la acción realizada por algunos animales de pasar el invierno en estado de inactividad y reposo (Los osos hibernan hasta la primavera). Invernar es un verbo que designa el acto de pasar el invierno en un lugar (¿Dónde invernan las golondrinas?).

Según la Fundación Oso Pardo, una ONG conservacionista que nació allá por el año 1992, actualmente en España habitan unos 250 osos pardos repartiéndose de la siguiente forma: 200 en la Asturias occidental, 30 en el norte de León, Palencia y sur de Cantabria, 2 en el Pirineo oscense y 25 en el catalán.

El pardo y el negro, en los gélidos inviernos de las regiones más norteñas, se cobijan en cuevas donde tienen un largo sueño: la hibernación.

Durante la hibernación, los osos pierden un tercio de su peso, principalmente grasa, pero también musculatura, que vuelven a recuperar rápidamente durante la primavera.

Las grasas son prácticamente la única fuente de energía utilizada por las aves migratorias y los animales en hibernación, así que si el oso pardo ha acumulado suficiente grasa antes de ponerse a hibernar entonces el problema energético está resuelto.

1. Murciélago. Los murciélagos (orden Chiroptera) son el único grupo de mamíferos pequeños que tiene una gran longevidad y pueden llegar a vivir hasta 30 años. Esto es posible gracias a la hibernación, que les permite restringir el gasto diario de energía a lo largo de su vida y vivir más tiempo.

”Comen durante 20 horas e ingieren 20,000 calorías al día”: así se preparan los osos antes la llegada del invierno – Telemundo Denver.

Estos son los osos que no hibernan. Los osos malayos (Ursus malayanus) y los osos perezosos (Melursus ursinus) del sudeste asiático no hibernan. Al norte de los osos de anteojos (Tremarctos ornatus) de América del Sur.

Los osos pardos son carroñeros y omnívoros, y sus dientes están adaptados para alimentarse tanto de vegetales como de animales. La miel es su alimento preferido y su dieta se basa principalmente en hongos, brotes, bayas, frutas, pastos, musgos, insectos y raíces.

Estos mamíferos pueden estar entre cinco y siete meses en letargo. Un oso saliendo de su periodo de hibernación. Los mamíferos suelen estar en periodo de hibernación cada año, entre cinco y siete meses.

¿Por qué hibernan los animales? La hibernación no deja de ser un mecanismo de defensa que tienen muchos animales para protegerse de las extremas temperaturas del invierno. Además, durante el invierno, muchas especies como los osos, encuentran serias dificultades para obtener alimento, y por tanto sobrevivir.

Durante el final de la época estival, esta especie aprovecha para mudar su pelo, lo que explica también que puedan producirse cambios en el tono de su pelaje de un año para otro. Además, en esta época se empieza a producir un cambio en su alimentación.

En el proceso de hibernación los animales entran en un estado de letargo en que reducen al mínimo el esfuerzo que realizan en todo su cuerpo: las constantes vitales se reducen (el corazón late más lento), el consumo de oxígeno disminuye y, al no consumir prácticamente ningún alimento, no invierten energía en excretar ...

La hibernación es un sueño muy profundo experimentado por algunos animales durante los días fríos del invierno. Los animales hibernan para conservar energía porque los alimentos no se encuentran tan fácilmente.

Estrictamente hablando, la hibernación no es un sueño real en absoluto, sino más bien un estado similar al sueño. Se asemeja a la calma o la rigidez y puede tener diferentes desencadenantes, como temperaturas cada vez más frías, cambios de luz diurna o un determinado límite de grasa corporal.

A lo largo de los Pirineos los osos se mueven por una vasta área de más de 8.200 km2, aunque las mayores densidades se concentran en los Pirineos centrales. En Cataluña, son especialmente querenciosos los bosques leridanos del Val d'Aran y Pallars Sobirà.

Las poblaciones más densas de osos de Europa se encuentran en los montes Dináricos y los Cárpatos. También se pueden encontrar y ver algunas poblaciones de osos en los Pirineos, los Alpes y los Apeninos.

La verdad es que poca gente sabe la historia del paso de los osos por Madrid, y en general por el Sistema Central. El único resquicio de ellos lo podemos encontrar en la castiza plaza de la Puerta del Sol.

Su sueño diario es de 16 horas.

A finales de abril y principios de mayo es cuando salen de la osera, dejan atrás la hibernación y tienen una necesidad comer perentoria», explica Carlos Nores, doctor en Biología.