¿Qué pasa si me limo mucho las uñas?

El Consejo General de Dentistas ha avisado de que limarse los dientes con una lima de uñas puede provocar sensibilidad dental e, incluso, infecciones y fracturas que obligarían a realizar una extracción y sustituirlos por implante.

En el peor de los casos, una uña demasiado fina puede provocar una inflamación del lecho ungueal, hematomas o incluso el desprendimiento completo de la uña estresada." ¿Cuáles son sus medidas SOS si la uña se ha limado demasiado?

Cortar o limar, ¿qué es lo más conveniente? Lo más recomendable es limar la uña ya que con el corte corremos el riesgo de que se abran a capas. Además, con el limado es más sencillo dar a la uña la forma deseada.

Lima las uñas siempre en la misma dirección y evita hacerlo cuando estén húmedas, ya que están más blandas. Nunca limes de atrás hacia adelante y viceversa puesto que eso hará que las uñas se escamen con más facilidad.

Y pulirlas de manera regular ayudará a que tus uñas sean el lienzo perfecto para cualquier manicura. Además, pulir las uñas es fundamental para hacer desaparecer cualquier manchita (causadas por el tabaco o la utilización de productos químicos) y para acabar con las uñas desvitalizadas y sin brillo.

Si pasar un mes entero sin uñas resulta demasiado, el tiempo mínimo de descanso son 2 semanas en las cuáles deberás enfocarte en que tus uñas se mantengan hidratadas la mayoría del tiempo.

Debes proteger las uñas y nutrirlas

Algo que nunca puede faltar es una buena hidratación y nutrición. Por eso aplicarte cada noche un producto hidratante sobre la raíz de la uña realizando masajes circulares ascendentes.

Lima las uñas siempre en la misma dirección y evita hacerlo cuando estén húmedas, ya que están más blandas. Los lados deben limarse en paralelo. Suavemente redondea los lados de la punta para darles forma oval. Retira cualquier resto que se haya podido quedar en tus uñas (puedes ayudarte de la lima).

La dirección del limado debe ser desde el borde libre en ambos lados, siempre hacia adelante y sin presionar demasiado, para evitar separar las capas de la misma.

Las uñas crecen 0,1 milímetros al día, por lo que cortarlas cada siete o diez días sería lo razonable. La especialista advierte que, después de la ducha que están más blandas, no hay que cortar las uñas porque al estar más blandas son más débiles, y además de esta manera se favorece que se deslaminen (onicosquisis).

Para uñas limas , no es necesario limpiarlas después de cada uso, sino aproximadamente una vez al mes. Tome un pequeño cepillo suave, jabón y agua, y cepille suavemente para eliminar todas las partículas y el polvo de las uñas incrustado entre los granos de diamante .

Forma de uña redonda: se consigue siguiendo la forma natural del dedo y limando los bordes de manera redondeada. Es la forma más común ya que además de ser cómoda es la que menos se rompe y se enganchan.

Las uñas, que están compuestas por capas laminadas de una proteína denominada «queratina», crecen desde la base de la uña debajo de la cutícula. Las uñas saludables son lisas, sin marcas ni surcos. Tienen un color y una consistencia uniformes, sin manchas ni decoloración.

El corte debes realizarlo de forma recta, limpio y ayudarte de una lima para limar los picos ligeramente, respetando en todo momento la forma del corte. Evita cortar la uña a ras del dedo. Si cortas demasiado la uña puedes provocar un mal crecimiento y que se quede encarnada, facilitando así, una posible infección.

Se dividen en varios tipos según el grosor de su grano y cada una está recomendada para un uso: lima 80-120, lima 150 y lima 180 a 240. Esta última es la que debes usar para uñas naturales y manicura en casa, pues el resto tienen un grano más grueso que solo es apto para uñas acrílicas y de gel.

Las uñas son solo células muertas de queratina que reciben el oxígeno y los nutrientes necesarios a través del torrente sanguíneo. Esto quiere decir que las uñas no necesitan estar expuestas al aire para que estén saludables o “respiren”, por lo tanto, no hay necesidad de dejar de hacerse las uñas por este motivo.

"Si tienes unas uñas fuertes y sanas y te retiras el esmalte de manera adecuada, sin dar tirones ni retirar las capas superiores de la uña y con productos específicos no pasaría nada y podría repetirse semanalmente o cada 10 dias, o incluso cada quince días", explica esta experta en manicura.

Si alguna vez te has planteado cada cuánto debes hacerte la manicura, debes saber que para mantener unas uñas impecables se recomienda llevarla a cabo una vez a la semana.

La manicura de esmalte normal es menos agresiva porque no implica la aplicación de productos químicos fuertes ni la exposición a la luz ultravioleta que se utiliza en la manicura de gel y acrílica.

Para poder fortalecer las uñas, tanto de las manos como de los pies, conviene seguir una serie de medidas en el día a día.

Nunca más de 15 días. No tenemos que extrañarnos si nuestras uñas se amarillean. Esto significa que estamos abusando de los esmaltes y que no están las estamos dejando respirar. Hay que evitar llevar la pintura durante mucho tiempo, nunca más de 15 días, recuerdan desde el CGCOP.

Opta por colores luminosos y brillantes, ya que los oscuros tienden a hacer que tus uñas parezcan más pequeñas, pero los claros las agrandan visualmente. Los tonos pastel, por ejemplo, producen un efecto alargador de los dedos.

Las uñas de las manos crecen a un ritmo de 4 centímetros al año, al menos el doble de rápido que las uñas de los pies. Ello se debe a que las de las manos sufren más desgaste, ya que se utilizan, por ejemplo, para abrir latas, cajas u objetos, y también para rascarse, por lo que necesitan reponerse antes.

¿Cómo tener uñas naturales, largas y fuertes?

Las limas de grosor 180 tienen un grano ideal para las uñas naturales y suelen ser lás más comunes. Las limas de grosor 240 se utilizar para dar un acabado final y pulir uñas naturales. Las limas entre los 400 y 1200 poseen los granos más finos y suele usarse para pulir y dar brillo a la uña.

El borde libre es la parte de la uña que no está unida al lecho de la uña. Es la zona que debemos cortar para mantener una buena higiene. La uña queda libre cuando alcanza el hiponiquio.

El eponiquio es el techo del receso ungueal proximal, y el hiponiquio el espacio entre el lecho y la placa ungueal en su borde libre.