¿Qué pasa si se le echa vinagre a una planta?

Al ser un líquido ácido, el vinagre ayuda a regular el pH del suelo y proporciona bienestar y más potencial para un crecimiento saludable a las plantas. Para ello, añade una cucharada de vinagre a un litro de agua y viértelo directamente en las macetas o en la tierra.

Gracias a su acidez, el vinagre ayuda a regular el pH de la tierra. Para usarlo con este fin, tendrás que mezclar una cucharada de vinagre blanco en un litro de agua, y regando tu maceta con el resultado. En particular, esta solución es ideal para plantas acidófilas como las hortensias, o el ficus.

Como te hemos comentado, el vinagre es muy beneficioso para las plantas. Se trata de un ácido que puede ayudar a regular el pH de la tierra de las plantas. Además, el vinagre es antiséptico, por lo que podemos tratar o prevenir algunas plagas o enfermedades en las plantas.

Usa vinagre blanco y agua para las plantas

Uno de los mejores usos del vinagre blanco es su función como herbicida, fungicida y repelente de insectos. La acidez del vinagre es tan potente que puede encargarse de eliminar los bichos que se cuelan en casa. ¡También es efectiva contra babosas y caracoles!

Si buscas un insecticida casero, económico y natural, simplemente mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua en una botella rociadora. Añade una cucharada de bicarbonato de sodio y agita vigorosamente antes de aplicarlo. Al terminar, desecha lo sobrante.

Previene el moho en las plantas

El vinagre tiene propiedades antifúngicas, por lo que es el aliado ideal para prevenir y controlar el moho en plantas de interior y exterior. Este líquido contiene ácido acético, tartárico y cítrico. Para usarlo, diluye dos cucharadas de vinagre en un recipiente con tres litros de agua.

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Para evitar lastimar tu planta debes diluir el vinagre en agua. La proporción es la siguiente: 10 ml de vinagre por cada litro de agua. Cuando tengas la solución mágica, pulveriza la planta afectada con ella, poniendo mucho énfasis en las áreas más problemáticas. Adiós pulgón.

Llená un balde con agua tibia, agregá ¼ de taza de vinagre blanco por litro de agua.

Canela como fungicida

Uno de los principales beneficios de la canela para las plantas es su uso como antifúngico. La canela es un remedio natural y económico para prevenir el ataque de los hongos que causan enfermedades en las plantas y también para lograr eliminarlos sin tener que recurrir a fungicidas químicos.

Si quieres saber cuáles son, ¡presta atención!

El bicarbonato de sodio ayuda a que tus plantas se hagan menos ácidas y esto provoca que reduzcan las posibilidades de crecimiento de hongos. Lo recomendable es que mezcles una cucharada pequeña de bicarbonato de sodio con pocas gotas de jabón líquido en un litro de agua.

Los azúcares facilitan la asimilación de elementos nutrientes y su transporte por la planta ya que reducen la presión osmótica con lo que se mejora su entrada en los tejidos vegetales. Durante el desarrollo vegetativo, el transporte tiene lugar hacia los ápices del tallo y la raíz.

Puedes diluir el vinagre con agua y rociar la tierra de las plantas o algunas piedras que coloques a su alrededor, o bien puedes colocar boles con agua y un chorro de vinagre alrededor de las plantas o de sus macetas, así como en tu cocina si tienes problemas con estos insectos dentro de casa.

El vinagre blanco es especialmente efectivo debido a su alto contenido de ácido acético, que repele a las hormigas y destruye sus rastros químicos.

Con vinagre

Solo tienes que mezclar vinagre, zumo de limón y un poco de jabón. El ácido del vinagre hará desaparecer las malas hierbas. Por tanto, cuanta más acidez tenga el vinagre que uses, más poder herbicida tendrá. Cabe señalar que el vinagre es capaz de matar bacterias y hongos.

El vinagre es un perfecto limpiador y antiséptico que elimina todo tipo de hongos y bacterias de la superficie del cristal. Gracias al olor tan característico, consigue mantener alejados a mosquitos, hormigas u otros insectos, por lo que, es el perfecto aliado de limpieza para la época veraniega.

1. Trampa para moscas blancas (opción 1) A las moscas blancas les encantan los alimentos fermentados, por ello, colocarles una trampa con vinagre blanco puede ser muy útil. El ácido acético de este líquido va a hacer que sus movimientos sean más lentos, lo cual permitirá atraparlas fácilmente.

El agua oxigenada es muy útil en el cuidado de jardines y huertos, ya que ayuda a las plantas a absorber los nutrientes. Para mantener las plantas en buen estado, mezcla agua oxigenada con cuatro partes de agua y utilízalo como fertilizante.

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Abonos caseros para plantas

Si aparecen pulgones, una buena solución sería la de plantar madreselva, lupino, dedalera, menta o la ortiga. El olor que desprenden estas plantas provoca que los pulgones no se acerquen a tu jardín o huerto, proporcionando seguridad y salud al mismo.

Pirecris^® insecticida agrícola contra pulgón, mosca blanca y cicadélidos. Pirecris^® es un insecticida agrícola para el control de plagas. Su potente efecto de choque o knock down provoca la rápida eliminación de pulgones, mosca blanca y cicadélidos.

Jabón potásico

Este jabón natural es una de las formas más efectivas de acabar con plagas como la mosca blanca, los pulgones, la araña roja o las cochinillas entre otros insectos dañinos para la planta. Basta con disolver un poco de este jabón en agua y aplicar con un fumigador sobre las zonas afectadas.

Esto se debe al grado de acidez que presenta un tipo de producto y otro, ya que, mientras que el vinagre blanco, apto para el consumo, tiene un porcentaje de acidez entre el 3% y el 5%, el vinagre de limpieza, también conocido como vinagre de alcohol, presenta un grado de acidez del 8%.

Vinagre de vino

Este vinagre está hecho con uva blanca a partir de su vino, y no se puede confundir con el vinagre blanco, que se elabora con ácido acético, derivado del alcohol de grano o de cereales. El vinagre de vino es rico en sales minerales; potasio, zinc, hierro, calcio, sodio y magnesio..