¿Qué pasa si uso calcetines todos los días?

La humedad, el calor y la oscuridad favorecen la aparición de hongos. "Para la gente que le sudan mucho los pies, es interesante que se ponga calcetines siempre e, incluso, sería recomendable que se los cambie una vez al día", porque la humedad, como sabemos, puede ser perjudicial para el mismo pie.

Puede provocar problemas de circulación

La forma natural que tiene el cuerpo para regular la temperatura es favoreciendo la circulación y bombeando sangre a las extremidades que están más frías. A la larga, dormir con calcetines puede derivar en problemas de varices o inflamación de pies y tobillos.

Todos los especialistas coinciden en que los calcetines son esenciales para la higiene de los pies, una capa de protección necesaria entre el pie y el zapato.

Nunca usas el mismo par de calcetines por más de 24 horas.

Básicamente se refiere a su uso por “todo el día”. Definitivamente puedes usar el mismo par desde que amaneces hasta que te vas a dormir, siempre y cuando a la mañana siguiente, te cambies el par.

Ventajas de dormir con calcetines

Ayuda a conciliar el sueño. ¿Por qué? Principalmente porque nos ayudan a subir algo nuestra temperatura corporal, permitiendo que nuestro cuerpo se relaje antes y durmiéndonos con mayor rapidez. Además, también hay gente que no disfruta del contacto con unas sábanas frías.

Puede provocar infección y la aparición de hongos

En parte, porque si los calcetines no están limpios, se pueden acumular bacterias en el tejido y eso facilitaría la aparición de enfermedades.

La elección del calcetín es casi tan importante como la elección del calzado a la hora de practicar deporte. Una de las funciones fundamentales del calcetín es defendernos del roce y de la fricción que nos causa el calzado. Sin embargo, tienen más funciones como la de controlar la humedad y mejorar la amortiguación.

Para los días calurosos o de mucha actividad, lo mejor son calcetines de lana merino, bambú, poliéster o nylon, ya que ofrecen transpirabilidad y comodidad. Por ese motivo el bambú y el poliéster también son excelentes opciones para cuando corremos o para el deporte.

Los calcetines que absorben la humedad están hechos de telas como lana merino, nylon y poliéster, las cuales están diseñadas para eliminar el sudor de la piel de modo que pueda evaporarse.

Para conseguirlo una buena idea es bañarte con agua caliente. Si prefieres no hacerlo con todo el cuerpo, mójate al menos los pies. Eso sí, recuerda secarlos bien. Un resultado similar se obtiene bebiendo antes de irte a la cama cualquiera de las cinco infusiones para dormir.

Ayuda a controlar la temperatura corporal

Tenerlos al aire libre puede reducir la temperatura corporal. Si eres una persona friolera, dormir con los pies cubiertos podrá ayudarte a controlar la sensación térmica. De hecho, dormir con los calcetines puestos puede ser una de las mejores fórmulas para conciliar el sueño.

De acuerdo con Tierno, se deben cambiar todos los días o si el pie suda mucho, dos veces al día. Incluso si no te bañas a diario debes cambiarte los calcetines. En caso de que prefieras dormir con calcetines, la recomendación es ponerte unos para dormir y cambiarte otros para el día.

CÓMO CUIDAR TUS CALCETINES

Mejora de la calidad del sueño

Y es que ir vestido supone, en cierto modo, una carga para el cuerpo, y en consecuencia una ligera percepción de estrés, especialmente en verano. Por eso, irse a la cama sin calzoncillos ayuda a descansar mejor y a tener un sueño más profundo, en el que el cuerpo está menos tensionado.

Por tanto, la conclusión está clara: no es bueno dormir sin almohada en ningún supuesto, ni existen potenciales beneficios en prescindir de ella por las noches. Tanto para evitar lesiones cervicales como vertebrales y discales, la almohada es una gran aliada que proporciona al cuerpo un descanso de calidad.

Aunque muchas personas puedan opinar que dormir con calcetines es antihigiénico o que incluso puede impedir la correcta circulación, no es así. Según los expertos, usar calcetines estabiliza la temperatura corporal favoreciendo la vasodilatación. El cerebro, por tanto, recibe el mensaje de que debe relajarse.

Aparecen debido a la fricción constante y repetida de la piel con otro material. Las causas más comunes son el uso de calzado inadecuado o el movimiento constante del calcetín al caminar.

Dormir con el pelo mojado, también puede desarrollar pequeños granitos o pústulas de acné (llagas pequeñas, inflamadas, llenas de pus y con aspecto de ampolla) que podrían provocar picor o dolor. Según el Dr. Sherber, se trataría de una infección denominada foliculitis bacteriana o micótica.

Las probabilidades de guardar malos olores en tu calzado, generar alguna infección en tus pies y sufrir de alguna rozadura aumentan drásticamente.

Es decir, busca promover la inclusión y el respeto a las personas con el síndrome a nivel social, educativo y laboral. Los calcetines desparejados hacen, además, referencia a la diferencia de cromosomas en las personas con síndrome de Down.

Los calcetines protegen de las rozaduras y suponen un refugio frente a los pies fríos. Por eso, si trasladas su función al mundo onírico, verás cómo sueñas con calcetines cuando necesitas cierta seguridad.

Calcetines cortos: son los más utilizados para zapatillas de deporte o deportivas de estilo casual. Calcetines tobilleros: también muy utilizados para deportivas o botines. Calcetines largos: son los más adecuados para llevarlos con zapatos y trajes formales. Así como en climas fríos.

La REGLA DE ORO para no equivocarte: combinar el calcetín con el mismo color que el del pantalón. Nunca con el mismo color que el zapato. Es decir, pantalón azul, pues calcetín azul. Así no fallas.

El algodón en la ropa interior aporta frescura y ayuda a tener mayor ventilación y absorción de la humedad. Asimismo, el bambú es un tejido técnico un 40 % más absorbente y tiene la capacidad de eliminar la humedad más rápido.

Estos son algunos consejos para evitar errores en la compra de los calcetines.

Opta por calcetines con tejidos ligeros y transpirables, como el algodón y el bambú. Estos materiales permiten que el aire fluya, disipando cualquier aroma indeseado.

Mantén los pies al aire libre: Siempre que puedas, quédate descalzo y ventila tus pies para que estos se aireen. Usa desodorantes de pies: Existen productos que contienen óxido de zinc que ayudan a absorber el exceso de humedad de la piel.