¿Qué provoca la hibernación?

La hibernación es un proceso natural a través del cual ciertas especies animales enfrentan situaciones adversas en el entorno, como pueden ser temperaturas muy bajas o carencia de alimentos por un periodo prolongado. Puede decirse que es un mecanismo de defensa que les ayuda a sobrevivir en condiciones extremas.

La razón principal es conservar energía durante el invierno cuando los alimentos escasean. Al ralentizar su actividad metabólica, los osos pueden sobrevivir durante meses con las reservas de grasa almacenadas. La hibernación también ayuda a las osas a dar a luz y criar a sus cachorros en un ambiente seguro y cálido.

La hibernación es el estado de letargo en el que algunos animales se sumergen durante los meses de invierno. Durante la hibernación el metabolismo de estos animales decrece hasta un nivel muy bajo, además de tener una temperatura corporal y una frecuencia respiratoria inferiores a lo normal.

Hibernación y estivación

La hibernación y la estivación son reacciones al clima extremo, pero en casos completamente opuestos: la hibernación se produce ante climas muy fríos y la estivación se realiza ante climas muy cálidos y secos.

El momento de entrar en hibernación depende de diversos factores como son la meteorología, la disponibilidad de alimento o de otras características individuales.

1. Murciélago. Los murciélagos (orden Chiroptera) son el único grupo de mamíferos pequeños que tiene una gran longevidad y pueden llegar a vivir hasta 30 años. Esto es posible gracias a la hibernación, que les permite restringir el gasto diario de energía a lo largo de su vida y vivir más tiempo.

Los mamíferos suelen estar en periodo de hibernación cada año, entre cinco y siete meses. Esta etapa, en la que el animal está sin comer, beber, orinar ni defecar, generalmente termina coincidiendo con la primavera y con la subida de las temperaturas tras los duros y fríos meses de invierno.

También los depósitos de grasa subcutáneos sirven de aislante térmico para conservar el calor corporal, y como almohadilla protectora frente agolpes y contusiones. Presenta interés especial el tejido adiposo pardo o marrón de los animales que hibernan como adaptación al frío pues su grasa suministra abundante calor.

Los osos hibernan después de unos meses ingiriendo grandes cantidades de comida para acumular grasa. Durante los meses de estado de letargo no ingieren ningún tipo de comida, no excretan ni orina ni heces, y se pasan todo el tiempo durmiendo sin a penas moverse.

La temperatura corporal del animal cae y su ritmo cardíaco y respiración se vuelven más lentos. Dormir durante todo el invierno requiere preparación y los animales que hibernan comienzan a prepararse en el otoño. Tratan de acumular la mayor cantidad de grasa posible, porque no van a comer durante el invierno.

Existen diversas especies animales que se suman en estos estados de letargo, pero no todas bajo el proceso de hibernación. Existen 4 tipos de dormancia: la hibernación, la diapausa, la estivación y la brumación.

Hibernar es un verbo que designa la acción realizada por algunos animales de pasar el invierno en estado de inactividad y reposo (Los osos hibernan hasta la primavera). Invernar es un verbo que designa el acto de pasar el invierno en un lugar (¿Dónde invernan las golondrinas?).

El mes de febrero es, para los osos, el del sueño más profundo. Las hembras que paren en esta época entran en las cuevas en diciembre y salen de las mismas el mes de abril. Los ejemplares solitarios suelen ser más "perezosos" a la hora de iniciar la hibernación.

Como sabes, las tortugas se entierran durante el proceso de hibernación y se esconden en su caparazón. Sin embargo, no te preocupes si llega a despertar y a moverse, es natural que salga de su caparazón cuando sube un poco la temperatura, sobre todo si hiberna en exterior, donde no es posible controlar el clima.

En el otoño, estos animales se preparan para el invierno comiendo comida extra y almacenándola en forma de grasa corporal. Usan esta grasa para obtener energía mientras hibernan.

Durante la hibernación el metabolismo es lento a fin de MINIMIZAR el gasto de energía. Las adaptaciones asociadas a la hibernación son la disminución de la temperatura corporal y la frecuencia respiratoria.

Los mamíferos norteamericanos generalmente duermen entre cinco y siete meses sin comer, beber, orinar ni defecar y después emergen de sus guaridas como si nada hubiera ocurrido.

Marmotas, lirones y erizos

Casi todas las especies de marmotas hibernan en grupo para mantener el calor de la madriguera y aumentar las posibilidades de superar los inviernos más duros. Las marmotas son animales muy sociables que utilizan una increíble variedad de sonidos para comunicarse entre ellas.

Un estudio sobre el sueño humano revela que los seres humanos experimentan más sueño durante el invierno en comparación con el verano.

Los animales que hibernan entran en un estado de inactividad al: ralentizar su frecuencia cardíaca y respiración y bajar la temperatura corporal y el metabolismo. Todo esto significa que pueden sobrevivir largos períodos sin comer, pero necesitan levantarse de vez en cuando para buscar comida y hacer sus necesidades.

Este estado se caracteriza por una somnolencia, un marcado descenso en la temperatura corporal y el ritmo metabólico y por una disminución en los signos vitales.

Durante el otoño, antes de hibernar, los osos pasan por un periodo de hiperfagia y consumen grandes cantidades de alimentos de elevado valor calórico, incrementando su capa de grasa para el reposo invernal.

Durante los meses más fríos de invierno, las hormigas estarán completamente quietas (hibernación), normalmente en los hormigueros. No pueden moverse debido a la falta del calor necesario para los procesos bioquímicos que permiten el movimiento.

En la lengua antigua era sinónimo de invernar ( 'pasar el invierno en un lugar' ; → invernar), pero en el uso actual significa, dicho de ciertos mamíferos, 'pasar el invierno en estado de hibernación o aletargamiento' : «Los Anfibios …

A diferencia de otros osos, los osos polares no hibernan. Por lo general, estos animales se mantienen activos todo el invierno. Con excepción del período en que en las hembras preñadas permanecen en sus guaridas con los cachorros hasta que éstos tienen el tamaño suficiente para sobrevivir en el exterior.

De hecho, los animales que hibernan detienen la digestión, no beben y no llevan a cabo ninguna necesidad fisiológica.

Pie de foto, Los osos negros hibernan hasta siete meses y emergen de sus cuevas en la primavera.