¿Que se libera cuando se llora?

Disminuye el estrés: las lágrimas liberan dos sustancias esenciales que hacen que las personas se sientan bien: oxitocina y endorfinas, conocidas también como las hormonas de la felicidad.

Las lágrimas emocionales contienen ciertos tipos de hormonas como la leucina encefalina, la cual es un calmante natural que produce el cuerpo.

Las lágrimas emocionales pueden ser únicas en su composición química. Se han detectado concentraciones de prolactina, manganeso, serotonina, cortisol y adrenalina en ellas. La mayoría de estos componentes tienen algún papel en la regulación del estado de ánimo y el estrés.

El llanto hace que se liberen dos clases de hormonas que funcionan como anestesias naturales y tienen la capacidad de paliar el dolor. Las lágrimas ambién nos ayudan a eliminar las toxinas que se van acumulando en el organismo a causa del estrés.

Pero ¿has notado que después de hacerlo te sientes cansada e incluso con sueño? Esto es porque al llorar liberamos oxitocina y endorfinas, lo cual se asocia con la capacidad de calmarnos. Incluso, un estudio encontró que el llanto puede ayudar a los bebés a dormir mejor.

Cuando una persona llora por todo es común que existan sentimientos depresivos, una mala gestión emocional o que haya un problema que lo está frenando. Si tus llantos están interrumpiendo el desarrollo normal de tu día a día, es importante que se estas emociones se traten.

A la serotonina también se la conoce como la hormona de la felicidad, ya que cuando aumentan sus niveles en los circuitos neuronales genera sensaciones de bienestar, relajación, satisfacción y aumenta la concentración y la autoestima.

Cuando estamos tristes o lloramos, a nivel neuronal, se incrementa el consumo de glucosa y oxígeno en el cerebro, por ello cuando lloramos incrementamos la frecuencia respiratoria; es ésta la respuesta emocional que más rápido se autolimita (10 minutos de llanto cansan mucho al cerebro).

Si bien la fisiología del llanto no está debidamente aclarada, tal vez la neurotransmisión y el incremento de la presión intracraneana sean suficientes para explicar su rol en la aparición de cefaleas primarias.

A llorar los ojos se hinchan porque se congestiona el sistema vascular de los párpados, en el que cuando además nos frotamos con las manos de forma inevitable, incrementamos esa vascularización de los párpados dando lugar a una mayor inflamación.

El síndrome pseudobulbar generalmente ocurre en personas con determinadas enfermedades o lesiones neurológicas que pueden afectar la manera en la que el cerebro controla la expresión emocional.

Consejos para superar la tristeza

Seis consejos para afrontar la tristeza en el día a día

La dopamina no sólo se libera cuando hemos realizado una actuación placentera sino que, es lo que nos mueve a actuar y se libera de manera previa para conseguir algo, ya sea alcanzar un bien o evitar un mal.

Sin embargo, unos niveles bajos de serotonina en el cuerpo, se asocian a depresión, fatiga, actitud negativa, irritabilidad, cambios de humor, difícil control de la ira, insomnio, dificultad en la concentración, ansiedad, labilidad emocional, distimia, necesidad de sentir satisfacción (es decir, deseo sexual) etc.

Entre los alimentos especialmente ricos en triptófano, que por tanto aumentan los niveles de serotonina se encuentran los huevos, los lácteos como la leche y el queso, la carne magra como la de pollo y pavo, los frutos secos como nueces y cacahuetes, el pescado, las legumbres, ciertas frutas como plátano, piña o ...

La tristeza se da a partir de una situación específica y real, como la ruptura de un vínculo amoroso, la muerte de un ser querido, la pérdida del empleo y dificultades económica, entre otras.

Hormonas relacionadas con la tristeza

Se trata de sustancias bioquímicas producidas por las glándulas endocrinas en nuestro cuerpo, que actúan como mensajeros químicos que se transportan a través del torrente sanguíneo hasta llegar a los órganos y los tejidos.

Tristeza. Sentimos dolor y opresión en el pecho que puede extenderse por los costados hacia la espalda. Hay presión en la garganta, como si una mano la atenazara. Las extremidades se vuelven pesadas y todo nuestro cuerpo se enlentece.

Descansa. Si te sientes abrumado, hacer estiramientos lentos o dar una caminata rápida pueden ayudarte a reducir el nivel de estrés. Respira. Respira profundo varias veces y cuenta hasta 10 para reducir las sensaciones de estrés.

Toma una ducha o baño relajante

Los dolores de cabeza que surgen a causa del estrés o la tensión, a menudo, pueden desaparecer fácilmente con el solo hecho de relajarte. Un baño caliente puede ayudarte, pero una ducha rápida también puede ser útil para eliminar el estrés del día.

El frío proporciona alivio y reduce la hinchazón. Mima tus ojos con una refrescante mascarilla de pepino. No solo reduce la hinchazón, sino que al mismo tiempo aporta hidratación. Si no dispones de mucho tiempo por la mañana, ponte un par de cucharillas frías en los ojos durante unos minutos.

Cuando lloramos, las lágrimas se drenan a la nariz a través del conducto nasolacrimal y se mezclan con el moco que hay en sus paredes, haciéndolo más líquido, lo que hace que caiga hasta el exterior; es por esta razón que casi siempre tenemos secreción nasal cuando lloramos.

El estrés y la emoción intensa hacen que los vasos sanguíneos de la piel se dilaten, lo que genera enrojecimiento y sensaciones de incomodidad. Para muchas personas, la meditación u otras técnicas de relajación similares son un valioso aliado para mantener su piel sensible distendida.

El estrés crónico inflama el intestino.

Anhedonia: La anhedonia a menudo ocurre como un síntoma de la depresión, a pesar de esto, también puede desarrollarse como un síntoma de otras afecciones de salud mental o por sí sola.

Al llorar se hinchan los ojos debido a que se congestiona el sistema vascular de los párpados y, además, al frotarlos solo logramos incrementar la vascularización de éstos. No obstante, es algo que no se puede evitar, ya que es un fenómeno natural.