¿Qué significa que una chapa sea galvanizada?

La chapa galvanizada es una lámina de acero que ha recibido un tratamiento específico consistente en el galvanizado en caliente. Como tal, se realizan inmersiones del acero en un crisol de zinc, de modo que da lugar a que las chapas queden plenamente recubiertas de este metal.

Las chapas, en general, tienen diferentes tamaños, grosores y formas, y pueden ser cortadas y moldeadas según las necesidades de cada proyecto o aplicación. Por su parte, hablamos de chapas galvanizadas cuando la lámina de acero está recubierta con una capa gruesa de zinc para protegerla contra la corrosión y el óxido.

El acero galvanizado es significativamente más débil que el acero inoxidable. Debido a que contiene solo una capa externa de recubrimiento anticorrosivo que se desgasta con el tiempo, no ofrece protección contra la oxidación durante período largos.

Consiste en introducir piezas de acero en zinc fundido, a una temperatura aproximada de 450°C hasta lograr un recubrimiento de 7-42 micras (recubrimiento bajo, regulado por la norma UNE EN ISO 10346) o de 45-200 micras (de alta duración, regulado por la norma UNE EN ISO 1461).

En entornos industriales y en localizaciones costeras el acero galvanizado puede durar de 50 a 100 años. Y en entornos muy corrosivos, alrededor de 25 años.

Las chapas cincalum son excelentes productos para utilizar en los techos de diferentes construcciones por sus características: Tienen mayor resistencia a la corrosión que otros tipos de chapas. Supera entre 2 y 6 veces la vida útil de las chapas galvanizadas. Gracias a su composición, no transpira ni condensa.

Otro de los factores que pueden influir en la elección del material para los proyectos de construcción es el precio. La chapa de acero galvanizada es bastante más cara que la chapa de aluminio, así que mucha gente opta por la segunda.

Las industrias que utilizan el acero galvanizado lo emplean en puentes y carreteras (armaduras para cubiertas y columnas, vigas, largueros, luz y señalización, barandas, cercas), lo mismo que las plantas de tratamiento de agua y aguas residuales (pasarelas, barandillas).

A continuación, te descubrimos las principales ventajas de este material.

El galvanizado tiene un toque blancuzco-azulado. La manera más segura es intentar soldarlo, genera un humillo blanco del zinc evaporado. Y, sin rasparlo para quitarle el zinc, no suelda bien. Lo mejor es comparar los mismos tornillos en acero inox, no inox y galvanizado.

La exposición constante a temperaturas inferiores a 200 C es un entorno perfectamente aceptable para el acero galvanizado. También se obtiene un buen comportamiento cuando se expone el acero galvanizado a temperaturas superiores a 200 C de forma intermitente.

Si la chapa a tratar se encuentra oxidada, limpiar con cepillo o esp tula y remover todo el material descascarado, semidesprendido o escamas de oxido, limpiar con desoxidante fosfatisante, enjuagar y colorcar Converox Antioxido en las zonas afectadas.

Diferencias entre zincado y galvanizado

Mientras que el proceso de galvanizado se consigue sumergiendo el tornillo en el baño de zinc, el zincado se lleva a cabo a través de un proceso de galvanoplastia, es decir, a partir de la aplicación tecnológica de la deposición de metales mediante electricidad.

Ventajas y desventajas de la lámina galvanizada

Cuando este sufre pequeños desgastes o añaden soldadura después de haber sido galvanizado, suele contaminarse y así comenzar a oxidarse. La forma más rápida y sencilla para proteger esas áreas es por medio de una capa de Pintura de Zinc formulada a base de zinc metálico de alta pureza.

COMO LIMPIAR ACERO GALVANIZADO

Por este motivo, la chapa galvanizada es más resistente que la negra.

La estructura de perfiles de acero galvanizado posee una duración mínima garantizada de 300 años.

En lo que se refiere al espesor que se utiliza en chapas para techos, los más utilizados son el 25, 27 y 22: calibre 25: 0,50 mm de espesor : calibre 27: 0,40 mm de espesor ; calibre 22: 0,70 mm de espesor.

Por su parte, y debido a que el acero inoxidable es más caro, aunque también más duradero, se utiliza para proyectos de gran presupuesto que requieren de una gran cantidad de trabajo pesado o componentes gruesos.

¿Qué es al acero galvanizado? El acero es una aleación de hierro con carbono, y el acero galvanizado está procesado con un tratamiento final para recubrirlo con varias capas de zinc. Gracias a este proceso es un material mucho más resiste a las rayaduras, tiene un acabado más duradero y se protege de la oxidación.

Aluminizada. Resulta de la aplicación de una capa fina de aleación de aluminio y otros metales por inmersión en caliente, dándole mayor resistencia al calor y la corrosión a temperaturas más altas. Puedes encontrar chapas aluminizadas trapezoidales o acanaladas en la sección "chapas para techo".

(2006), en la primera etapa, el comportamiento electroquímico del acero galvanizado se relaciona con la disolución de la capa de óxido de zinc que se forma en contacto con el aire. En la segunda etapa, la superficie de la capa de zinc se cubre con un óxido blanco que permite la corrosión del acero.

Así, el galvanizado puede ser de 4 tipos:

El Galvanizado en caliente se obtiene introduciendo el material en un baño de zinc fundido a altas temperaturas, y consiguiendo un espesor de recubrimiento de zinc de 60-70 micras. Es lo que produce una mayor calidad.

Las pinturas más adecuadas para ser aplicadas sobre el galvanizado son aquellas que presentan alta adherencia, alta permeabilidad y que son insaponificables, como es el caso de las pinturas epoxi – isocianato, que hoy en día son las más usadas en la industria por ofrecer una serie de ventajas.

Las tuberías y conexiones de acero galvanizado están fabricadas para trabajar a presiones máximas de 10.5 kg/cm2 y 21.2 kg/cm2 .