¿Qué son los costos fijos y cómo se determinan?

Costos Fijos: son aquellos costos que permanecen constantes durante un periodo de tiempo determinado, sin importar el volumen de producción. Los costos fijos se consideran como tal en su monto global, pero unitariamente se consideran variables.

Fórmulas de coste fijo

Los costos fijos son aquellos que siempre tendrás que pagar, sin importar el nivel de producción que tengas, por ejemplo: los servicios de luz y agua o la renta de tu establecimiento.

Es decir, si aumenta la producción de un producto o servicio y el costo aumenta también entonces es un costo variable. En cambio, si aumenta o disminuye la producción de un producto o servicio y el costo se mantiene inalterable es un costo fijo.

La fórmula básica para calcular el costo variable de un producto o servicio es:

¿Cómo calcular el punto de equilibrio?

Para calcular el costo variable total, debemos sumar todos aquellos costos que hayamos tenido en un período de tiempo y que están relacionados con nuestro nivel de producción. Si queremos calcular el costo variable unitario, debemos dividir los costos variables totales y la cantidad de unidades producidas.

En esta categoría se encuentran partidas como la electricidad, alimentación, transporte, teléfono fijo, móvil, internet, artículos de limpieza y agua, entre otros.

Los costes fijos, o regulados, de la energía son una serie de impuestos que debemos pagar, sí o sí, en nuestra factura de la luz. Dentro de estos costes podemos encontrar impuestos del estado, peajes y tasas que son obligatorias para el 100% de los usuarios.

En resumen, los costos fijos son los gastos necesarios y constantes para mantener la operación básica de la empresa, mientras que los gastos fijos son los desembolsos regulares que pueden variar en el corto plazo, pero que son necesarios para mantener la actividad comercial.

¿Qué costos fijos pueden convertirse en costos variables? En muchos casos los costes de infraestructura, que normalmente son fijos, pueden ser convertidos en costos variables haciendo uso de diferentes paquetes de proveedores y opciones de financiación.

Al ser un costo fijo, a medida que aumenta la producción, el costo a imputar a cada unidad es cada vez menor. El costo variable medio (costo variable por unidad de producto) puede ser decreciente en una fase inicial (coincide con los volúmenes de actividad en los que la función de producción tiene pendiente creciente).

Costo fijo comprometido

Se corresponde con los gastos que surgen por necesidad y que no puede modificarse sin que afecte de manera adversa a la producción de la empresa.

Q = CF/(PVun-CVun)

Como habrás adivinado por su posición en la fórmula, Q es el punto muerto que quieres conocer, esto es, la cantidad que debes vender para que tu negocio empiece a tener beneficios. Por su parte, CF son los costes fijos de tu empresa, mientras que PVun es el precio de venta unitario.

La fórmula por la que se expresa el punto muerto es la siguiente: Q_c = CF / (PV_u - CV_u)

Costo total = costo de producción + gastos de operación.

Algunos de estos gastos variables, son:

Es la suma de los costos fijos y variables.

¿Qué es el umbral de rentabilidad? El umbral de rentabilidad, también llamado punto muerto o punto de equilibrio, representa el momento en que los costes totales de un negocio son iguales que los ingresos totales del mismo. Es decir, se trata de ese punto en el que la empresa no tiene ni ganancias ni pérdidas.

Los costos marginales se calculan mediante la división del aumento en los costos de producción por el aumento en la producción de unidades. Por ejemplo, una empresa comienza pagando $100 para fabricar 100 unidades de un producto. Luego, paga $50 adicionales para fabricar 100 unidades más de dicho producto.

¿Cómo calcular el costo unitario de un producto? Se calcula al sumar todos los gastos necesarios para producir o comercializar tus productos y dividirlo entre el número de bienes o productos que vas a producir o poner a la venta.

Por lo tanto, la fórmula del umbral de rentabilidad o punto muerto se calcula dividiendo el coste fijo total entre la diferencia entre el precio de venta y el precio de coste unitario, es decir, los costes fijos entre el margen de beneficio por unidad.

Gasto indirecto.

Ejemplos de gastos: mantenimiento de equipo, impuestos, nómina administrativa, material de oficina, primas de seguros publicidad, etc.

La empresa quiere saber cuánto necesita vender para poder cubrir sus gastos totales, es decir, el punto de equilibrio. Para obtenerlo debe dividir los costes fijos entre el resultado de restarle al precio los costes variables.

Gastos variables, que varían en función de la actividad del negocio, como las compras de mercaderías. Gastos fijos, cuyo importe no depende de las ventas o actividad del negocio, como, por ejemplo, el alquiler.

Los costes fijos son aquellos que no dependen del número de ventas, son constantes. Entre los que se encuentran el alquiler, amortización del equipamiento, mano de obra fija del restaurante, tributos y cánones locales, formación del personal o el sueldo del gerente o el director del restaurante.

Los costos variables se relacionan con el nivel de actividad. Los costos fijos se relacionan con la estructura o capacidad instalada de la empresa. Nivel de producción en el cual la empresa no tiene ganancias ni pérdidas.