¿Quién llega a la tierra prometida?

Fue Josué el primero en llegar a la tierra prometida al mando del pueblo de Israel. Josué fue el sucesor de Moisés, quién había sacado al pueblo de Israel de Egipto. Abraham fue muy anterior a ellos. Pero Dios le había prometido a Abraham que le daría una tierra prometida.

Así como Moisés en su papel de profeta, legislador, mediador y libertador fue un modelo de Jesucristo, también Josué, que llevó a Israel a la tierra prometida, fue un símbolo de Jesús, que lleva a los fieles a la suprema tierra de promisión, el reino celestial.

Contando aproximadamente el mismo número de mujeres, llegamos a 46.000. Entonces, sumando los 601,730 a los 46,000, se puede decir que hubo alrededor de 750,000 a partir de los veinte años.

Según el Éxodo (23:31), Dios fija los límites de la Tierra Prometida “desde el mar Rojo hasta el mar de los filisteos y desde el desierto hasta el río Éufrates”.

La ciudad egipcia de la cual salen los israelitas en el Éxodo también es llamada Ramesés, y según la tradición bíblica, se trató de unos 600.000 varones (sin contar a las mujeres, niños y ancianos, ni tampoco a las personas no hebreas que los acompañaron).

En la actualidad se corresponde con Israel, Palestina (la Franja de Gaza y Cisjordania), la zona occidental de Jordania y algunos puntos de Siria y Líbano.

Jehová le promete a Isaac una posteridad tan numerosa como las estrellas del cielo — En su descendencia serán bendecidas todas las naciones — Jehová hace prosperar a Isaac temporal y espiritualmente por causa de Abraham — Isaac ofrece sacrificios — Esaú se casa con mujeres heteas para tristeza de sus padres.

Génesis 21 contiene el relato de cómo se cumplió la promesa que Dios les hizo a Abraham y a Sara de que tendrían un hijo. Los acontecimientos narrados en Génesis 21 tuvieron lugar cuando Abraham tenía cien años de edad y Sara noventa.

Otros pasajes, sin embargo, nos aclaran el asunto. Deuteronomio 3:26 y 4:21 muestra que el Señor dijo a Moisés que la razón por la que no pudo entrar en la tierra prometida fue que El (el Señor) estaba enojado con Moisés por causa de los hijos de Israel.

El patriarca Abraham, ya en el siglo XVIII antes de Cristo, contempló esa tierra como parte de la promesa que Dios le había hecho y que se cumpliría a través de su hijo Isaac.

El Lugar de Nacimiento de Jesús en Belén (Palestina) retirado de la Lista del Patrimonio Mundial en Peligro - UNESCO World Heritage Centre.

El pueblo de la alianza debe peregrinar cuarenta años por el desierto debido a su desobediencia al Señor. Este es uno de los contenidos esenciales que trasmite el Libro de los Números¹. En efecto, Israel debe vagar ese largo tiempo a causa de su rebeldía, que ha merecido tal punición divina.

En este momento tiene lugar la gran irrupción de Dios en la historia: la manifestación a Moisés. Dios escucha el clamor del pueblo oprimido e interviene para hacer justicia y liberarlo. Moisés será el profeta liberador.

​ Según la tradición bíblica, el pueblo judío se originó a partir de tres patriarcas: Abraham, Isaac y Jacob. Jacob recibió el nombre de Israel y más adelante la tierra del pueblo judío fue nombrada como él. Jacob tuvo doce hijos, cada uno de los cuales fue padre de las doce tribus de Israel.

Antes de la Primera Guerra Mundial, el territorio que hoy en día llamamos Israel (antes conocido como Palestina) y los territorios aledaños formaban parte del Imperio Turco Otomano.

Guiarás a los israelitas hasta la tierra de Canaán y harás el reparto de la tierra. El Señor irá delante de ti, no tengas miedo".

El 14 de mayo de 1948, de modo unilateral, los sionistas proclamaron la fundación del Estado de Israel en la tierra de Palestina. Los países árabes que rodeaban esta zona: Egipto, Siria, Jordania, no podían tolerar semejante robo de sus tierras y declararon la guerra a Israel que consigue la victoria en poco tiempo.

Isaac envejeció y quedó ciego. Antes de morir, le pidió a Esaú que cazara y cocinara un animal para que él lo comiera y disfrutara de la comida. Rebeca sabía que era el momento de que Isaac diera la bendición de la primogenitura.

“Mas su padre lo llamó Benjamín” (Génesis 35:18).

Dios le pide a Moisés que se quite las sandalias porque el lugar que está pisando es tierra santa, se presenta ante él y le entrega la misión de volver a Egipto y liberar al pueblo hebreo para llevarlos a una tierra buena y amplia.

Dios promete a Sus hijos que, si siguen los preceptos de Su plan y el ejemplo de Su Hijo Amado, guardan los mandamientos y perseveran con fe hasta el fin, entonces, en virtud de la redención del Salvador, “tendrán la vida eterna, que es el mayor de todos los dones de Dios” ⁴.

Abraham había esperado 25 años por el hijo que Dios le prometió y era tiempo para que se cumpliera la promesa. “Tal como el Señor lo había dicho, se ocupó de Sara y cumplió con la promesa que le ha- bía hecho.” (Génesis 21:1 NVI) Sara dio a luz un hijo.

Al pico del cerro Siyagha, a 700 metros sobre el valle del Jordán, se lo identifica con el Monte Nebo, el lugar donde Moisés ̶ el profeta venerado por las tres religiones monoteístas ̶ pudo ver la Tierra Prometida antes de morir.

Cuando los israelitas se sentían desesperados a causa de la sed durante su deambular por el desierto, el Señor ordenó a Moisés: «Mira, Yo estaré allí ante ti sobre la peña en Horeb, y tú golpearás la roca y saldrá agua de ella para que beba el pueblo» (éxodo 17: 6).

Dios le dijo a su pueblo: «Israel, cuando eras un país joven, yo te demostré mi amor por ti. Yo te saqué de Egipto porque eres un hijo para mí.

Yahveh habló a Moisés y le dijo: «Manda a los hijos de Israel y diles: Cuando hayáis entrado en la tierra de Canaán, ésta será la tierra que os ha de caer en herencia, y estos serán sus límites: Tendréis el lado del sur desde el desierto de Zin hasta la frontera de Edom, y su límite estará en el extremo del Mar Salado, ...